Sociedad

La Guardia Civil tiene ya «pistas fiables» de Diana

Los agentes prevén resolver el caso pronto al ver coincidencias entre postes telefónicos y matrículas

Diana y su hermana Valeria en una foto publicada en una red social por la menor
Diana y su hermana Valeria en una foto publicada en una red social por la menorlarazon

Los agentes prevén resolver el caso pronto al ver coincidencias entre postes telefónicos y matrículas

Ha sido un trabajo de muchas horas. Y, probablemente, las que quedan; repasar una y mil veces los datos que se disponen. Pero, al final, según fuentes de la investigación, la Guardia Civil ha encontrado una serie de «pistas fiables» que permiten ser «moderadamente optimistas» sobre un esclarecimiento de la desaparición de Diana Quer a corto o medio plazo. Las mismas fuentes han confirmado lo adelantado ayer por LA RAZÓN sobre los momentos de tensión que se vivieron durante la reunión que varios agentes de la Unidad Central Operativa (UCO) mantuvieron con la madre de la desaparecida durante más de cinco horas en su domicilio de Pozuelo de Alarcón, en Madrid.

Al tratarse de los momentos cruciales de la investigación, se negaron a facilitar ningún dato que pueda poner en peligro las pesquisas. Sin embargo, todo parece indicar que la Guardia Civil ha obtenido «pistas fiables» gracias a la conjunción de una serie de elementos, en los que intervienen el examen de los datos de los postes telefónicos con los que se fue conectando el móvil de Diana desde su casa, en A Pobra de Caramiñal, hasta las proximidades de Rianxo, a unos 20 km; el cotejo de las matrículas de los automóviles y motos grabadas por las cámaras de tráfico; y el testimonio de algunos testigos a los que se ha dado credibilidad.

El trayecto que hizo Diana, desde las 03:00 de la mañana hasta las 04:15, desde A Pobra hasta Rianxo, a bordo de un vehículo o de una moto, se ha podido reconstruir gracias a la conexión del móvil de la desaparecida a los distintos postes. La velocidad con que pasaba de uno a otro indicaba, sin género de dudas, que iba a bordo de un vehículo. La coincidencia en el poste y en el horario de otros móviles, cuyos usuarios son fácilmente identificables (ya no se venden tarjetas anónimas de prepago) y la posible presencia de algún automóvil de su propiedad o relacionado con ellos, ofrecerían una evidencia difícil de refutar. Además, algunas de las conocidas de Diana han señalado que un individuo la invitó a subir a su coche. Dado el secreto de las actuaciones, se desconoce si precisaron la marca y el modelo del vehículo.

A este respecto, este periódico ha podido saber que la madre de Diana no pudo reconocer, en los vídeos que le mostraron los agentes de la UCO que estuvieron con ella en la tarde noche del pasado lunes, a ninguna de las personas que estuvieron con su hija.

Las citadas fuentes, para mantener el necesario hermetismo, no descartaron que las pistas puedan venir de otras líneas de investigación que la Unidad de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de La Coruña y agentes de la UCO siguen desde los primeros momentos y que no han trascendido a la opinión pública.

Por lo que respecta a la reunión mantenida por los agentes de esta unidad con la madre de Diana el pasado lunes, se confirman los momentos de tensión.

Los guardias, en su labor de esclarecer la desaparición de la chica, pusieron sobre la mesa una serie de asuntos, como los episodios de ansiedad de la hija pequeña, Valeria, o los escapadas de la mayor durante algunos días, que se habrían producido en el pasado y que la madre había negado, extremos que la Benemérita ha confirmado.

Además, está la inexactitud al indicar la vestimenta que llevaba la chica en el momento de la desa-parición: el cambio de versiones, según se iban conociendo nuevos hechos. Desde la investigación se insiste en que todo se hace para poder dar con el paradero de Diana y que toda colaboración que se preste es poca.

«Desafortunadamente, salvo un milagro, no creo que llegue a proteger a mi hija Diana», manifestó ayer su padre, Juan Carlos Quer, a la salida del edificio de los juzgados de Riveira, en donde compareció durante unas cuatro horas junto a su hija menor, Valeria, respecto a la custodia. Ayer mismo se conocieron las denuncias interpuestas por la madre en las que la progenitora denuncia que su ex marido no le dejó hablar con su hija Diana, que la intentó manipular y que durante cuatro meses no le pasaba la pensión correspondiente por Valeria. En respuesta, Juan Carlos explicó que hasta que contrajo matrimonio «jamás» había tenido una denuncia y «solamente a raíz de la demanda de divorcio que ella instó «cayeron» 9 o 10 denuncias que, por supuesto, todas se han archivado o todas se han sobreseído». «Lean entre líneas», añadió.