Asuntos sociales

La OMS exige a las empresas que pongan salas para facilitar la lactancia

Sólo dos de cada diez madres pueden sacarse leche en el trabajo. Pide además que las bajas sean de cuatro meses

La OMS exige a las empresas que pongan salas para facilitar la lactancia
La OMS exige a las empresas que pongan salas para facilitar la lactancialarazon

Sólo dos de cada diez madres pueden sacarse leche en el trabajo. Pide además que las bajas sean de cuatro meses

A lo largo de esta semana, la Organización Mundial de la Salud (OMS) ha puesto en marcha la Semana de la Lactancia Materna, con la que plantea a los gobiernos de todos los países medidas específicas para promover que las madres que lo deseen puedan amamantar a sus hijos. Se trata de medidas tanto para las empresas que contratan como para los sindicatos que protegen a las mujeres trabajadoras e, incluso, para los propios compañeros de trabajo. Además de recomendar que se garanticen las bajas maternales remuneradas de, al menos, cuatro meses, para que las madres puedan amamantar a sus hijos de forma natural, desde el organismo también propone que se les exija a las empresas la habilitación de salas específicas en los lugares de trabajo para que las madres puedan «estar protegidas» y cuenten con «tiempo suficiente para sacarse la leche» sin sentirse incómodas.

En cuanto a la recomendación de las bajas maternales de cuatro meses, desde la Federación Española de Familias Numerosas (FEFN) recuerdan que es un periodo que en nuestro país ya se cumple. «Estamos en la media europea en este sentido. Sí que es cierto que el Parlamento Europeo ha debatido durante dos años una directiva para ampliar el permiso, pero finalmente fue desechada, porque los gobiernos no se han puesto de acuerdo. Además, la oposición de las empresas es grande», recuerda Raúl Sánchez, director de la FEFN. Por otro lado, señala que «algunos especialistas son partidarios de mantener el periodo de lactancia durante más tiempo. O, en todo caso, de que las empresas lo faciliten. Sobre todo porque es un periodo de tiempo en el que la madre no debe perder contacto con su hijo».

Con todo, si bien la federación considera que es un periodo razonable, hay una reivindicación que continúa pendiente. «Somos muy partidarios de una demanda social: que los permisos sean iguales tanto para el padre como para la madre. La natalidad depende mucho de que en el hogar se impliquen el padre y la madre por igual. Por eso, el Gobierno debería poner su granito de arena y financiar esos permisos», afirma Sánchez. Hay que recordar que, actualmente, el permiso paterno es de 15 días, mientras que para el padre de familia numerosa apenas es de 20. Y es que, «si sólo se la alarga la baja maternal, es la mujer la que sale perjudicada», pues ella acaba haciéndose cargo del recién nacido la mayor parte del tiempo.

No obstante, lo que está muy lejos de cumplirse es la segunda petición. Como indica Gloria Boal, vocal de la Comisión Nacional de Especialidades de Matronas en representación del Consejo General de Enfermería: «En torno al 20 por ciento de las madres que deciden amamantar a sus hijos siguen haciéndolo al volver a su trabajo de la baja». Y es que una de las primeras preguntas que esta enfermera les hace a las pacientes que pasan por su consulta es: «¿Dónde puedes sacarte la leche?», y según Boal, «no conozco a nadie que cuente con una sala en exclusiva en su lugar de trabajo». Y es que, al margen de las tomas de desayuno, merienda y cena, una vez reincorporadas al trabajo «el resto de tomas se pierden», explica la matrona. Por eso, ella ayuda a estas mujeres a adaptar la lactancia a su horario. «Lo hacemos 15 días antes y vamos reduciendo las tomas poniendo al niño la mitad de tiempo para que la mama vaya produciendo cada vez menos». Eso sí, al retirarles este tipo de alimentación, «se sustituye por el biberón».

Inma Mellado, portavoz de la Liga de la Leche, coincide con Boal en que son necesarios estos espacios destinados a las mujeres porque, como muchas de ellas afirman en las reuniones que organiza la asociación ahora, se conforman con extraerse la leche en los baños o en lugares inimaginables. «Algunas nos cuentan que utilizan el cuarto de la fotocopiadora o, en el mejor de los casos, despachos sin ventana, con algo de intimidad». Como explica Mellado, «a las reuniones acuden madres con problemas muy concretos. Contamos con una conductora de autobús que se sacaba la leche en un bar que encontraba al final de la línea». Con todo, tanto Boal como Mellado son optimistas con respecto al aumento de las mujeres que optan por la lactancia. «Hace ocho años, eran muy pocas las que optaban por dar el pecho, ahora prácticamente todas quieren», apunta Boal.

Más de mil madres donaron leche en 2014

Cerca de 1.500 neonatos se beneficiaron de las donaciones de leche materna de 1.315 madres, que donaron 4.967 litros de leche a lo largo del pasado año. Son los datos que ofrece la Asociación Española de Bancos de Leche Humana y que destina estas donaciones especialmente a recién nacidos prematuros con un peso inferior a 1.500 gramos. Todo a través de los Bancos de Leche, en los que participan 22 hospitales.