Desaparición de la española en México: La amenaza de llevarla «a lo seco»

Según la versión de su marido, los asaltantes le dijeron que iban a esclavizar sexualmente a su esposa. Pero no es la única hipótesis.

El caso de Pilar Garrido trae de cabeza a los investigadores. 18 días después de su desaparición siguen sin tener noticias de los presuntos captores. El tiempo se agota y la versión de los hechos que apuntan a un simple secuestro pierden fuerza.

En su declaración ante las autoridades, Jorge Fernández, marido de la desaparecida, declaró que inicialmente los tres asaltantes querían llevarse su vehículo, pero cambiaron de idea cuando su mujer trató de sacar al bebé de ambos del asiento trasero. En ese momento decidieron raptar a la joven española y, según ha podido saber LA RAZÓN, aseguraron a Fernández que se la llevarían «a lo seco». Una expresión comúnmente utilizada por las bandas delictivas en México para referirse al secuestro de mujeres con el objetivo de ser esclavizadas sexualmente.

La violencia empleada por los grupos del narcotráfico ha elevado las cifras de homicidios en Tamaulipas a más de 1.000 en apenas año y medio. Esta línea de investigación podría explicar por qué no se han tenido noticias de los presuntos captores en 18 días, pero no es la única en curso.

La otra afecta directamente a su marido, único testigo de lo ocurrido. El hecho de que tardara dos días en formalizar la denuncia y el hallazgo de alguna incongruencia en su declaración habrían puesto la lupa sobre su figura. De hecho, fuentes de la Fiscalía, consultadas por LA RAZÓN, aseguran que se está investigando si Fernández había contratado seguros de vida unas semanas antes de la desaparición de su esposa. La hermana de la desaparecida desmiente ciertos datos, asegurando que «mi cuñado no trabaja en seguridad, es profesor universitario de seguridad y justicia». Además, la familia de la víctima afirma que la denuncia «se realizó una hora después de suceder la desaparición».

Ayer, el portavoz de seguridad de Tamaulipas, Luis Alberto Rodríguez, aseguró que no descartan ninguna línea de investigación. Tampoco pueden confirmar ni desmentir que el marido de la víctima esté siendo investigado. Lo que sí ha querido negar es que se hayan encontrado restos de sangre en el maletero del vehículo como algunos medios habían difundido en los últimos días. La prueba de Luminol fue negativa.

La repercusión del caso a nivel internacional ha llevado a las autoridades mexicanas a redoblar los esfuerzos en la búsqueda de Pilar Garrido. Miembros de la Marina mexicana apoyados, desde el aire, por helicópteros y, por tierra, por unidades caninas rastrean sin descanso la autopista 75 de Tamaulipas.

Fuentes cercanas a la investigación confirman que la búsqueda de Pilar se centra en el embalse Las Adjuntas, una región pantanosa. Por el momento no se descarta ninguna hipótesis, pero los días pasan y el rastro de Pilar pierde fuerza.