Las lluvias y el deshielo mantienen en alerta por inundación a media Navarra

Las lluvias incesantes de los últimos días y el deshielo favorecido por las temperaturas tienen en alerta a media Navarra ante el temor de crecidas importantes en distintos ríos a su paso por la comunidad, en especial el Ebro. Mientras que Pamplona ha bajado su nivel de emergencia al descender esta pasada madrugada el caudal del río Arga, que ayer inundó algunas zonas de la capital, y en el resto de la comarca el Gobierno afirma que "lo peor ya ha pasado", la preocupación se ha trasladado a la Zona Media y la Ribera, donde el Ejecutivo foral mantiene el nivel de alerta 1.

El Ayuntamiento de Tudela ha indicado que los datos que maneja, con una altura del nivel del Ebro de 7 metros y más de 2.500 metros cúbicos de agua por segundo mañana, "parecen predecir una riada similar a la de 2013".

Para paliar daños, ha acordado cortar accesos viarios, limitar áreas de estacionamiento, cerrar el polideportivo, colocar sacos de protección, retirar contenedores y trasladar algunas dependencias municipales.

También Castejón se prepara para una crecida que la Confederación Hidrográfica dice que será extraordinaria, con 2.400 metros cúbicos por segundo, 100 más que la ordinaria, y que se sumará a la que ya se registró hace dos semanas, anegando campos y cortando la carretera N-113 Pamplona-Madrid.

Esta vía está desde ese día cerrada por inundación, la misma situación que a estas horas se repite en otras catorce carreteras de la red secundaria de la comunidad, entre ellas la que da acceso al polígono industrial de Landaben, en Pamplona, y a las que hay que añadir cuatro más cortadas por nieve.

Los otros puntos de atención en Navarra son el río Ega, que esta noche se prevé que alcance su cota máxima y que ya desde la mañana tiene en alerta roja a la localidad de Andosilla; y el Arga a su paso por Funes, donde para esta tarde se espera un caudal que puede superar los 1.000 m3/s y causar daños de cierta entidad, por lo que el colegio público de Infantil y Primaria permanece cerrado.

También están en alerta Liédena y Caparroso por las crecidas del Irati y el Argón, aunque en ambos casos parece que ha comenzado a descender el volumen de agua. En la zona norte de Navarra persisten problemas puntuales, como los cortes de la N-1 en Olazagutia por arroyos o torrenteras.

En todos estos lugares el Gobierno foral pide precaución tras la muerte ayer tarde en Arruazu de un hombre que cayó al río Arakil, y advierte de que puede haber problemas puntuales en otros puntos de la comunidad y en "tierras donde las motas se encuentran o bien dañadas o muy cercanas a su punto de daño".

En este mismo sentido se ha manifestado el presidente de la Confederación Hidrográfica del Ebro, Xavier de Pedro, quien esta mañana, ante la mayor riada desde 2007, alertaba desde Zaragoza del riesgo de "rotura"de las motas de contención (defensas de tierra) en el Ebro, pero instaba a no intentar reparar daños en estas condiciones.

De Pedro ha señalado que si no hay problemas con las motas no debería haber tampoco afecciones graves para los municipios, aunque en la localidad aragonesa de Novillas ha dado por seguro que mañana una zona se verá afectada por las filtraciones de la avenida.

También se prevé que el sábado se produzca una avenida extraordinaria del Ebro en Zaragoza, donde el caudal puede llegar a 2.100 metros cúbicos por segundo cuando el límite de la ordinaria son 2.000.

Una vez que pase la situación, De Pedro ha invitado a un debate "sosegado"entre ayuntamientos, comunidades y administración central en el que se concreten actuaciones para lograr una "gestión integral"del río.

Una invitación que ha llegado después de críticas procedentes de organizaciones como la Unión de Agricultores y Ganaderos de Navarra (UAGN) y de que la presidenta de Navarra, Yolanda Barcina, respaldara hoy las actuaciones llevadas a cabo por algunos ayuntamientos navarros y exigiera a la CHE que actúe "lo antes posible"y permita, conforme a las leyes, limpiar y hacer motas.14-25/15