Barcelona

Las mujeres maltratadas por sus parejas tienden a sufrir abusos en su vida

Las mujeres maltratadas por sus parejas tienden a sufrir más abusos en su vida, una situación que los expertos definen como poli-victimización, según un estudio publicado en el Journal of Family Violence, y que han realizado investigadores de la Universitat Pompeu Fabra (UPF). Los autores del estudio son Jorge Rodríguez Menés y Cristina Sobrino, investigadores del Departamento de Ciencias Políticas y Sociales de la UPF, junto a David Puig, investigador del Departamento de Economía de la Universidad Cornell (EEUU).

La poli-victimización adquiere múltiples formas, como el acoso, el acecho, y el abuso psicológico, físico o sexual, e incluye a múltiples agresores, como amigos, compañeros, conocidos y extraños, además de familiares y parejas actuales y anteriores, y según señala este estudio, deja profundas huellas físicas y psicológicas en la mujer, como lesiones, cicatrices, depresión, y baja autoestima.

Según informa la UPF, el estudio se basa en los datos de la primera encuesta europea de violencia contra las mujeres, organizada por la Agencia Europea de Derechos Humanos (FRA), y evidencia que las mujeres que han sufrido abusos en ámbitos privados o familiares tendrán, a lo largo de su vida, una mayor propensión a sufrir más episodios de violencia de género en otros ámbitos.

Las mismas fuentes han señalado que en 2011 se hizo una encuesta preliminar en Barcelona, y que los autores entrevistaron en profundidad a 20 mujeres elegidas aleatoriamente entre las residentes en Barcelona, y 10 víctimas de violencia de género atendidas en centros de acogida de mujeres maltratadas.

Aunque ya se sabía que las mujeres maltratadas en un ámbito familiar e íntimo por familiares y amigos durante la niñez tienen una mayor propensión a ser nuevamente maltratadas a lo largo de su vida, este estudio constata que esta pauta de poli-victimización se extiende también a otros ámbitos de la vida de las mujeres, como el trabajo y el espacio público.

La investigación también contrasta la verosimilitud de dos explicaciones, no necesariamente excluyentes, sobre las causas de la poli-victimización de las mujeres.

Añade que pese a que los análisis no son concluyentes debido a limitaciones en el diseño del pre-test, los resultados apuntan a que la exposición continuada a condiciones de pobreza y marginación incrementa sólo marginalmente, aunque significativamente, los riesgos de poli-victimización de la mujer.

No obstante, el factor que mejor predice la poli-victimización es la victimización traumática experimentada en el algún punto del curso de su vida, y el estudio concluye que de confirmarse estos resultados, habría que diseñar políticas más efectivas de prevención y tratamiento de la violencia contra las mujeres en los ámbitos familiares e íntimos, que es donde deja huellas más profundas.