Accidente de Germanwings

«Llevamos a las víctimas en nuestro corazón»

El cardenal arzobispo de Barcelona, Lluís Martínez Sistach, ha recordado a las 150 víctimas del avión de Germanwings que se estrelló el pasado 24 de marzo en los Alpes franceses, "a los que llevamos en el corazón", ha dicho en su homilía durante el funeral que se oficia en la Sagrada Familia.

Al iniciar su homilía, a la que asisten los Reyes, el cardenal también ha tenido palabras de recuerdo para otras tragedias humanitarias, como las ocurridas en Nepal o en el mar Mediterráneo.

"Todos llevamos también en nuestro corazón el dolor y plegaria por las víctimas y heridos del terremoto de Nepal y por las víctimas de las pateras en el Mediterráneo", ha especificado el cardenal, que ha pronunciado su homilía en catalán y castellano.

"Nos hemos reunido, queridos hermanos y hermanas, en esta Basílica de la Sagrada Familia para rezar por nuestros queridos difuntos víctimas del trágico accidente de aviación de aquel reciente doloroso 24 de marzo", ha señalado el prelado.

En un guiño a la polémica suscitada durante los últimos días porque los gobiernos catalán y central preferían una ceremonia interreligiosa, el cardenal Sistach ha avanzado que se trata de una "celebración religiosa con representantes de diversas confesiones"para "expresar nuestro afecto a las víctimas y a sus familiares".

"Llevamos en nuestro corazón -de una manera muy especial sus familiares y amigos- el dolor por la muerte de estos queridos hermanos. Todos deseamos encontrar en la plegaria el consuelo y la paz que Dios nos puede dar en estos momentos de sufrimiento, de manera muy especial a vosotros queridos familiares", se ha dirigido a los casi 600 allegados que han acudido al acto.

En su homilía, el arzobispo barcelonés ha recordado que San Pablo dijo: "Ninguno de nosotros vive para sí mismo y ninguno muere para sí mismo. Si vivimos, vivimos para el Señor; si morimos, morimos para el Señor; en la vida y en la muerte somos del Señor".

"Siempre estamos en las manos providenciales de Dios", ha indicado el prelado, que ha subrayado que "la muerte violenta y repentina de nuestros queridos hermanos podría paralizar la vida de quienes les aman muchísimo".

"Sin embargo, el mensaje paulino que hemos escuchado nos ha de dar coraje para vivir para el Señor y para los hermanos, para amar a Dios y amar a los hermanos, esperando con la ayuda y la misericordia del Señor encontrarnos un día con ellos en la Jerusalén celestial", ha consolado el cardenal.

Tras recordar que hoy se celebra en Cataluña la festividad de su patrona, la virgen de Montserrat, Martínez Sistach ha recomendado "mirar a María, como Madre de Misericordia. La dulzura de su mirada maternal nos acompaña siempre. María ha conocido la profundidad del dolor humano, ella que estuvo al pie de la cruz de su hijo amado".

"A ella confiamos especialmente a nuestros hermanos que murieron en aquel vuelo aéreo que terminó en los Alpes franceses y le pedimos que sea realidad lo que el poeta Jacint Verdaguer pedía a la virgen de Montserrat en su Virolai: 'Guíanos hacia el cielo'", ha concluido Sistach.