España

Música, el nuevo «medicamento»

El Hospital 12 de Octubre y la asociación Música en Vena participan en un ensayo científico para demostrar que los acordes curan.

Gabriel y Aapo tocando una pieza en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). 178 pacientes han participado en el ensayo
Gabriel y Aapo tocando una pieza en la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI). 178 pacientes han participado en el ensayolarazon

El Hospital 12 de Octubre y la asociación Música en Vena participan en un ensayo científico para demostrar que los acordes curan.

¿Cuántas veces, ante una situación de estrés, de ansiedad, en la que parece que el corazón se va a salir de nuestro cuerpo, hemos escuchado una canción que nos ha devuelto la calma? Se suele hablar del poder de la música, pero hasta el momento no se había realizado ningún estudio científico en España. El Hospital Universitario 12 de Octubre junto a la asociación Música en Vena, tras años de colaboración, han iniciado un ensayo clínico como los acordes que tocan Juan, Alberto, Miguel, Aapo, Gabriel, Elisa, Paula, Paco, Marta, Guillermo o Juan, que ayudan a los pacientes a recuperarse.

Por el momento, han tocado 720 horas de música desde que se inició la investigación en noviembre de 2016 y han participado 178 pacientes de tres especialidades: Unidad de Cuidados Intensivos (UCI), Neonatología y Rehabilitación. «La música puede ser muy efectiva en la recuperación y, del mismo modo, puede ser una buena salida para los músicos», afirma Juan García de Cuevas, director de la asociación. Y es que varios de los médicos que participan en el estudio lo tienen claro antes de que se conozcan los primeros datos el próximo mes de julio. «La música debería incluirse en los tratamientos como un medicamento más», afirma Juan Carlos Montejo, jefe de la Unidad de Cuidados Intensivos del 12 de Octubre. Por eso, la idea del centro es integrar la iniciativa en otras especialidades como Neurología, Hematología y Cardiología.

Pero, hasta el momento, ¿qué resultados han percibido? Desde Música en Vena destacan tres: reducción de la ansiedad; mejora de la frecuencia cardiaca en pacientes hospitalizados en UCI; en pacientes con dolor crónico de suelo pélvico la rehabilitación se acelera; relajación y facilidad para amamantar en neonatos. En referencia a este último área, «La Jose», una cantante y trabajadora social, hace memoria sobre una anécdota divertida: «Recuerdo un momento que no sé si contar...», dice con una amplia sonrisa. «Empecé a cantar y el bebé se tiró un pedo sonoro e hizo gestos de relajación. De repente, todos los que estábamos ahí, mamá y personal sanitario incluidos, estallamos de risa. Fue un momento genial». La experiencia de esta joven, que compone sus propias canciones, se centra sobre todo en Neonatología y reconoce que «el vínculo que se crea con los pacientes al estar tan cerca, piel con piel, es impresionante. Es innegable que la música ayuda y mucho», añade.

Desde hace años, el 12 de Octubre trabaja con la idea de ser un «hospital sinfónico», que «lleve luz a todos los lugares del hospital», afirma su gerente, Carmen Martínez de Pancorbo. Por ello, en las diferentes plantas del hospital no es raro encontrarse con alguno de los jóvenes que componen el programa MIR, que en lugar de ser médicos, son Músicos Internos Residentes. Son artistas en situación de desempleo que encuentran en los pacientes a su mejor público. «Yo llevo desde abril en el proyecto y me interesa mucho por su vertiente social. Es muy diferente a lo que estaba acostumbrada. Empatizas tanto con el entorno que consigue aunar lo mejor que tienes como músico y como persona», explica Elisa Ortiz, violonchelista de 27 años. Reconoce que «hay momentos en los que se me saltan las lágrimas». Ella también ha vivido situaciones que le hacen afirmar que cada una de las notas que toca ayudan a los enfermos. «En la UCI impresiona mucho cuando ves cómo su respiración cambia, se armoniza. Y es que la música no sólo calma al paciente, el ritmo de trabajo del personal sanitario también es diferente en esos momentos».

Uno de los miembros del comité asesor de la entidad es Yerko Ivánovic, médico rehabilitador que se está especializando en Neurociencia. Además, es pianista, por lo que centra su trabajo de investigación en la relación de la ciencia y la música. «En Estados Unidos, sobre todo, se han hecho estudios que explican cómo nuestro cerebro se modifica gracias a las melodías. No es sólo un hecho artístico. Por eso creo que debería pautarse la música a cualquier enfermo, es la que moldea nuestro cerebro», sostiene.