Nissan Moco, Kia Borrego o Ford Corrida, los otros coches que tuvieron que cambiar de nombre

¿Quién no se ha preguntado alguna vez de dónde proceden los nombres de los coches? Encontrar uno adecuado puede resultar una tarea ardua y tediosa. A lo largo de la historia del motor, han aparecido en el mercado modelos con nombres desafortunados que han sido objeto de risas y han llevado a realizar todo tipo de chistes. Y es que a veces el nombre del coche juega una mala pasada a las marcas llegando a influir incluso en el número de ventas. Mientras algunas como Audi o Mercedes eligen números y letras sin formar ninguna palabra para designar a sus coches, otras prefieren complicarse un poco más.

Los profesionales de marketing buscan un nombre llamativo y sugerente, tratando de gustar a todo el personal, y sin dobles sentidos. Desafortunadamente, no siempre se consigue y algunos nombres que en unos países no significan nada, en otros, se traducen a palabras malsonantes o adjetivos ofensivos. A veces el idioma puede estar en nuestra contra.

Audi Q3

Con este ejemplo se confirma que no siempre da resultado nombrar los vehículos únicamente con letras y números. Fue lanzado al mercado en el año 2011 y al pronunciar su nombre suena: ‘cu-tres’, que según la RAE es “tacaño, miserable, pobre, descuidado, sucio o de mala calidad”.

Opel Manta

El Opel Manta fue un deportivo de tracción trasera que llegó en 1970 y fue reemplazado por el Opel Calibra en 1988. Una de las numerosas acepciones de Manta según la RAE es la de “ser holgazán, no tener habilidad para algo”.

Ford Corrida

Prototipo presentado en 1976 por la marca americana que, a pesar de no tener ninguna interpretación negativa en muchos países, no pasó desapercibido en el mercado español.

Mitsubishi Pajero

Su nombre lo dice todo. Aunque en realidad, 'Pajero' aludía a una especie de felino en japonés, algunos países lo cambiaron y se optó por Montero en España, América –excepto Brasil- e India y por Shogun en Gran Bretaña.

Mazda Laputa

Llegó al mercado en 1999 pero dejó de producirse en 2006 y aunque este coche no llegó a comercializarse en España, sí lo hizo en EE UU. Su nombre se debe al lugar ficticio descrito en Los viajes de Gulliver, de Jonathan Swift. En el libro, Laputa es una isla con base de diamante que flota en los aires por medio de un gigantesco imán. Aunque por mucha literatura que hubiera en él, este coche no llegó a comercializarse en España, pero sí lo hizo en EE UU.

Nissan Moco

Se trata de un modelo japonés que salió a la venta en 2006. Este coche apareció por primera vez en un Salón del Automóvil de Tokyo en 2005 y justamente en color verde. Su diseño y su pequeño tamaño llamaron la atención pero parece ser que no lo suficiente para los mercados hispanos.

Kia Borrego

"¡Me he comprado un borrego!"no suena muy bien a la hora de hablar de un coche. Este modelo también conocido como Mohave, es un todoterreno de lujo producido por el fabricante surcoreano Kia Motors con tres filas de asientos y espacio para ocho pasajeros.

Lamborghini Reventón

El Lamborghini Reventon es un deportivo fabricado entre 2007 y 2010. Y fue el más potente de la marca hasta el 2009, cuando se lanzó el Lamborghini Murciélago LP670-4 SV, superado posteriormente por el Lamborghini Aventador LP700-4 y el Lamborghini Veneno. Nombres que no pasan inadvertidos.

Lancia Marica

Fue presentado por la firma italiana en 1969 con unas líneas que influenciaron a muchos modelos de la época, pero con un nombre que presentaba connotaciones sexuales. Quizás para algunos este sea el auto perfecto, pero para otros no resulta muy apropiado.

Estos son tan solo algunos de los ejemplares que podemos encontrar con los nombres más desafortunados de la historia automovilística. AMC Gremlin, Volkswagen Nardo, Ford Pinto, Lexus LF-A o Volkswagen Jetta forman parte de la larga lista de coches "afectados".