Policía

«Patrick siempre decía de su tío que era un hijo de puta», según una testigo

“En el mes de julio me preguntó por una pala de albañil", explica la compañero de piso del asesino confeso

François Patrick Nogueira Gouveia, a su llegada esta tarde la Comandancia de la Guardia Civil de Guadalajara.
François Patrick Nogueira Gouveia, a su llegada esta tarde la Comandancia de la Guardia Civil de Guadalajara.larazon

“Conocí a Patrick porque alquiló una habitación vacía en el piso en que vivía con unas compañeras. Nos contó que era brasileño, de un pueblo del norte del país. No hacía nada, ni estudiaba ni trabajaba: solo iba al gimnasio y jugaba al fútbol en el Torrejón", explica la testigo.

Patrick se montó en un autobús en Pioz a las 6.57 de la mañana. Ningún pasajero se fijó en él. Ni siquiera el conductor. Jamás se les ocurrió imaginar que aquel joven brasileño con una mochila en su espalda había degollado unas horas antes a sus tíos y a sus dos primos, de uno y tres años de edad. Al llegar a Alcalá de Henares, Patrick se bajó y caminó hasta un contenedor de basura cercano. Allí tiró la mochila donde, entre otras cosas, había escondido su ropa ensangrentada y el arma del crimen.

Con el alivio de haberse desprendido de las pruebas que lo incriminaban se refugió en su piso. En realidad tenía alquilada una sola habitación en una casa que compartía con otras personas. Una de ellas, Pilar, entró en la casa poco después del mediodía. Casualmente regresaba ese día con una amiga de un viaje a Tailandia. LA RAZÓN ha tenido acceso a su declaración que es extremadamente reveladora ya que describe el estado de ánimo del asesino en las horas posteriores al crimen.

“Conocí a Patrick porque alquiló una habitación vacía en el piso en que vivía con unas compañeras. Nos contó que era brasileño, de un pueblo del norte del país. No hacía nada, ni estudiaba ni trabajaba: solo iba al gimnasio y jugaba al fútbol en el Torrejón. El 18 de agosto (horas después del crimen) llegué a la vivienda sobre la una de la tarde. Iba con mi amiga Laura. Patrick estaba casi desnudo, solo llevaba puesto un pantalón corto. Vi que tenía el torso lleno de tatuajes. Me lo encontré todo muy sucio y desordenado. Los platos sucios encima de la mesa, en el fregadero también, mucho polvo y el baño estaba especialmente sucio. Cuando salió de su habitación me preguntó qué tal estaba y le reproché como estaba la casa. Me dijo que si le hubiera avisado que regresaba ese día de Tailandia hubiera limpiado. Sin más se metió en su habitación. No me dio ni siquiera dos besos. Estaba muy raro y a partir de ese día siguió igual: raro, muy callado, como triste. No salía apenas de su habitación. Antes era bromista con la gente del piso, de los que bailaba por el pasillo y nos reíamos. Algo había cambiado”, cuenta Pilar en su declaración ante la Guardia Civil.

En su relato incluye otros datos que han ayudado a la UCO a perfilar el móvil del crimen. “Antes de aquel día”, continúa su relato Pilar, “me contó que a los 14 años se había marchado de casa, que había residido en Madrid, después en Londres y que de allí se vino a Torrejón de Ardoz a vivir con su tío. De Marcos siempre decía que era un hijo de puta.Hablaba de él con rabia. Aseguraba que se había ido casi sin avisar de la casa que compartían y que le había dejado tirado en Torrejón teniendo que hacer frente él sólo al pago del alquiler. Le describía como un caradura al que su padre le mandaba dinero porque lo necesitaba para ocuparse de él y que seguía quedándoselo a pesar de que ya no vivían juntos”.

Su obsesión era tal que según esta testigo, jamás hablaba de Janaina ni de sus primos pequeños. Estaba obsesionado con Marcos. Incluso hay elementos de la declaración de Pilar que permiten colegir que Patrick planificó el crimen un semanas antes de cometerlo. “En el mes de julio me preguntó por una pala de albañil. Le enseñé una foto en internet para asegurarme de que me estaba preguntando por ese objeto porque no tenía sentido lo que preguntaba. Él no era muy inteligente, más bien algo carente. Pasaba mucho tiempo en su habitación con el ordenador. Hablaba mal de su país y decía que estaba muy a gusto en España”.

Otro testimonio que ha resultado muy interesante para los investigadores es el de Laura, la amiga que acompañaba a Pilar el día 18 de agosto, cuando accedieron a la casa y encontraron a Patrick: “Llegamos a la casa sobre la una. Patrick estaba somnoliento, como de resaca. Iba casi desnudo. No le vi ningún tipo de arañazo y le miré bien porque lucía un cuerpo muy atractivo y atlético. Si hubiera tenido alguna herida me habría fijado porque soy enfermera. La vivienda estaba sucia. Platos en el fregadero, encima de la mesa, una botella de alcohol, cartones de tetrabrik de vino pequeños. Vi hasta vómitos recientes en el suelo del baño”.

Apoyo.

Pasaban los días y Pedro, el dueño del chalet de Pioz miraba su cuenta y comprobaba que Marcos no había abonado la mensualidad. Le llamó insistentemente, pero nadie respondía al teléfono. De repente, el día 30 recibió un sms: “Pedro, me gustaría saber si es posible pagarte el mes sólo en el final. Mes pasado yo no tenía cómo pagar. Mi madre me va a enviar dinero sobre el día 20 (de septiembre) y como el prestamista pone gastos adicionales tengo que pagarle lo más temprano posible”. El whastapp en realidad lo escribió Patrick. Trece días antes había asesinado a sus tíos y a sus primos y con esta comunicación pretendía retrasar el hallazgo de los cuerpos.