Reproducción asistida

Una pareja se entera de que son hermanos al acudir a una clínica de fecundación in vitro

La sorpresa ocurrió cuando en un control rutinario y tras una prueba de ADN, el médico les dijo que eran mellizos

Una clínica de reproducción asistida
Una clínica de reproducción asistidalarazon

La sorpresa ocurrió cuando en un control rutinario y tras una prueba de ADN, el médico les dijo que eran mellizos

Una pareja de Mississippi (Estados Unidos) llevaba tiempo buscando el que fuese su primer hijo. Tras no conseguirlo por medios naturales, decidieron acudir a una clínica de fecundación in vitro para poder tener a su bebé, cuando descubrieron la impactante noticia.

La pareja, que ha decidido permanecer en el anonimato, ha contado su historia a los medios locales. Tras dar el paso para lograr tener su bebé mediante este método de fecundación, tuvieron que someterse a una prueba rutinaria de ADN. Según explica el médico en el Mississippi Herald «es algo rutinario para comprobar si hay alguna relación entre las muestras».

«Mi primera reacción fue pensar que ambas personas estaba relacionadas entre sí, quizás primos hermanos. Sin embargo tras un análisis profundo de la muestra, el facultativo concluyó que ambos eran mellizos», explicó el doctor, que también prefiere guardar su anonimato.

Una vez obtenido el resultado, el médico procedió a contarles lo ocurrido con sus muestras biológicas, la pareja no se creía lo que les estaba explicando. De hecho, ellos mismos le contaron a su doctor que «era una divertida coincidencia» que ambos cumpliesen los años el mismo día, e incluso, que se parecieran físicamente. Pero tras entender lo que ocurría, el matrimonio se mostró abatido.

Al parecer, los padres biológicos de la pareja habrían muerto en un accidente de tráfico cuando estos eran muy pequeños, por lo que ambos fueron dados a dos familias de acogida diferentes puesto que no tenían parientes cercanos que se pudiesen hacer cargo de ellos. Pasados los años y ya mayores de edad, la pareja se conoció cuando estudiaban en la universidad.

Tras los acontecimientos, la pareja se está replanteando si seguir o no con el tratamiento, y en el caso de continuar con él, estudiará los pasos a seguir, puesto que en Mississippi el matrimonio entre hermanos es ilegal y está penado con diez años de prisión.