Toros

Videos

Padilla: «Ya no podía estirar más la cuerda»

El torero Juan José Padilla ha anunciado hoy en Sevilla que se retirará tras una gira de despedida en 2018.

Juan José Padilla
Juan José Padillalarazon

El torero Juan José Padilla ha anunciado hoy en Sevilla su retirada tras una gira de despedida en 2018.

Juan José Padilla dejará los ruedos la próxima temporada. Su intención es colgar el vestido de torear en Zaragoza y cerrar un círculo de 25 años de alternativa en la plaza donde pudo acabar todo por la cornada en la cara que le infirió el toro «Marqués» de Ana Romero en el año 2011. El diestro jerezano compareció en un hotel de Sevilla para hacer pública su decisión junto a las personas que han sido claves en su trayectoria: su padre, sus hermanos Óscar y Jaime –ambos banderilleros–, Diego Robles y Finito de Córdoba, quien lo acompañó abriendo cartel en 2016 cuando consiguió salir por la Puerta del Príncipe de La Maestranza.

Padilla (Jerez de la Frontera, 1973) tuvo que esforzarse en contener la emoción en algunos momentos. «Cuando decidí ponerme por primera vez el vestido de torero tenía claro que un día me lo quitaría. Y ese maravilloso vestido te lo puede quitar definitivamente un toro, un médico, la afición o tú mismo. Hoy le pido a Dios un último esfuerzo para que permita ser yo mismo quien me lo quite tras una temporada dedicada a agradecer, con toda la fuerza del Ciclón, el inmenso cariño, respeto y apoyo que he recibido en todos estos años, muy especialmente los últimos seis y que han sido el principal motor para que este Ciclón soplara con fuerza como lo ha hecho». La gravísima cornada que recibió en la plaza de toros de La Misericordia cuando intentaba clavar un par de banderillas supuso un antes y un después en su carrera. Los toros le han castigado mucho, los costurones le recorren el cuerpo, pero nunca como ese día estuvo tan cerca de la muerte. Convaleciente en el hospital ya dejó claro que iba a volver a los ruedos. Y lo hizo cinco meses después ciñéndose un parche de pirata y renovando un caudal de valor que le ha llevado también a recibir nuevos percances. Uno de ellos, por cierto, hace un año en Zaragoza: en la misma plaza y en el mismo ojo que perdió hace seis años. Ahora cree que es el momento «pletórico» en el que hay que parar definitivamente. «Han sido 25 años extraordinarios en los que no han faltado ni éxitos ni fracasos. Pero los unos y los otros me han ayudado a escribir este inolvidable capítulo de mi vida por el que tengo que dar gracias a Dios y a todos los que me han ayudado».

Su objetivo es trazar una temporada de despedida «bonita». «No quiero torear por torear sino disfrutar toreando». Comenzará en Castellón y toreará en las principales plazas que le han marcado como Sevilla, Bilbao, Pamplona o Zaragoza, además de en Francia y Portugal. Lisboa fue una de los cosos del país luso que mencionó. De momento no se plantea un número ni si hará temporada americana. En los últimos años ha sido de los toreros que más paseíllos ha realizado. Fue líder del escalafón en 2017. Sumó cerca de un centenar de corridas. No obstante, el diestro jerezano reconoció que la cornada de Zaragoza también abrió una nueva etapa en la que pudo salir del circuito de las corridas duras como Victorino Martín o Miura, dos hierros que han marcado a sangre y fuego su carrera especialmente en el norte de España y en el sur de Francia. «Si hubiera tenido que seguir matando ‘miuras’ o ‘cebadas’ seguro que no hubiera vuelto. Y eso el público lo ha entendido y lo ha respetado».

«He tomado la decisión más importante de mi carrera y ya no hay vuelta de hoja. Siento que ya no podía estirar más la cuerda ni seguir tentando la suerte. Cuando acabe 2018 me voy del toreo y me voy con la satisfacción de haberlo dado todo por el toro y por mi profesión», deslizó Padilla. No obstante, la retirada será un punto y seguido en el toreo. Apuntó nuevos cometidos profesionales que no llegó a desvelar. «Cuando se cierre la próxima temporada el Ciclón no se apagará y soplará en otros ruedos en los que hago mucha falta». «Es emocionante decidir que uno se va, ahora solo pido a Dios que me ayude a colgar el vestido y dedicarme a otras cosas que me ilusionan». «Me voy en el mejor momento de mi carrera. Lo hago feliz y con sensaciones muy positivas, consciente de que es para empezar una nueva etapa en mi vida»

Su última temporada se la dedica a su padre, con quien se fundió en un abrazo. «Mi familia me ha ayudado a cumplir un sueño en mi carrera y en esta decisión me ha apoyado. Quiero dedicar esta temporada a la persona que más me ha ayudado, mi padre». Entre el público también se encontraba Finito de Córdoba, con quien también se abrazó emocionado tras la comparecencia. Con Finito ha compartido Padilla amistad y apoderado. Y también algún traje de luces. El diestro jerezano llegó a vestir un terno con el que Finito recibió una cornada en Alicante. El Pirata siempre ha espantado las supersticiones. Por eso dirá adiós a los ruedos en la plaza donde empezó todo y donde pudo acabar todo hace seis años.