Valencia

Fandiño, «un hombre a solas frente a su destino»

El diestro vasco estrenará la temporada en Madrid el próximo Domingo de Ramos con una encerrona ante seis toros de divisas de leyenda

Iván Fandiño, esta mañana junto al empresario de Las Ventas y los ganaderos de la cita
Iván Fandiño, esta mañana junto al empresario de Las Ventas y los ganaderos de la citalarazon

Palha, Partido de Resina, Victorino Martín, Cebada Gago, José Escolar y Adolfo Martín. Seis páginas de leyenda en la Tauromaquia aguardando en toriles a Iván Fandiño. En Madrid, el 29 de marzo. Primer sorbo a la temporada en Las Ventas. Será gran reserva. Emociones fuertes para un torero, que abrió la Puerta Grande en San Isidro 2014, inconformista por naturaleza. Por eso, el de Orduña buscará el triple salto mortal con un solo el Domingo de Ramos. «Es un desafío conmigo mismo y con mi carrera, porque es el mayor reto de toda ella, ese 29 de marzo, Madrid verá a un hombre a solas frente a su destino». Palabra de Fandiño.

«Este reto tenía que ser en Madrid, una plaza esencial en mi carrera y una afición a la que le debo todo lo que soy, en su día encontré en ella el trampolín que me catapultó hasta el lugar que ocupo y mi identidad como torero, por tanto gracias Madrid, gracias afición de Madrid», comentó el espada vasco durante la presentación de su encerrona en solitario. La sexta de su trayectoria después de las que ya ha realizado en Bilbao, Valencia, Bayona, Guadalajara y su Orduña natal.

«No busco el triunfo como objetivo primordial, aunque espero que pueda terminar llegando de la mano, pero obviamente no es una corrida más y voy con las miras puestas en lo más alto», afirmó un Fandiño «muy consciente de este desafío porque es fruto de una decisión muy madura». Y es que el desvelo, los miedos, los nervios surgen más allá de la gloria de orejas y Puertas Grandes: «Lo que más me preocupa, sin duda, es estar a la altura del respeto y del cariño que la afición de Madrid siempre ha demostrado hacia mí».

Fandiño, que precisamente celebra esta campaña el décimo aniversario de su alternativa, aprovechó también la puesta de largo de su solo para «agradecer a la empresa y a los ganaderos su disponibilidad para poder sacar adelante este reto, pero, sobre todo, al aficionado, que es el que pasa cada tarde por taquilla y al que muchas veces damos la espalda por intereses, la buena acogida con que ha aceptado mi gesto».

En cuanto a la elección de estas seis ganaderías, ubicadas todas ellas entre las denominadas «duras» del campo bravo, el torero vasco explicó que «su elección se debe únicamente a que son hierros legendarios y que además, todos ellos son muy del gusto de la afición de Madrid, verdadero protagonista de este espectáculo». «Nunca me he considerado ni torerista ni torista, no distingo entre dos tipos de ganaderías», quiso zanjar Fandiño que, en sus 22 paseíllos en Las Ventas, ha estoqueado 16 ganaderías diferentes y nunca ha repetido más de una vez con ninguna de ellas. Un compromiso con la variedad de encastes y sangres más que loable, por inusual, en estos tiempos.

Por ello, la media docena de criadores de bravo anunciados coincidió en «reconocer el enorme gesto de Fandiño matando estos seis toros, de estas ganaderías, en Madrid y que se trata de una gesta necesaria para la Tauromaquia». Así, Adolfo Martín, que escogió uno de los cinqueños del cercado apartado para San Isidro, aplaudió una encerrona que «honra a todos los aficionados» al tiempo que deseó que su tarde y su triunfo se conviertan «en ese revulsivo fundamental para levantar la afición en España». José Escolar, por su parte, ahondó en la elección del ganado, puesto que «son seis hierros que la mayoría del público, si le da a escoger, hubiera elegido». «Nosotros, como hacemos siempre en esta plaza, hemos priorizado un animal, muy rematado ya, con la seriedad y el trapío que requiere Madrid por encima de lo demás».

No obstante, la res de mayor impacto visual lleva sangre onubense. Un precioso cárdeno claro de Partido de Resina que impresiona por su ofensivo aspecto de interminables pitones. «Aunque dé esa apariencia de cornalón, es bajo y está muy bien hecho, muy en el tipo de la casa, es una lámina», describe Javier Morales, representante de la antigua vacada de Pablo Romero, sobre su toro, otro cinqueño y que «ya estuvo reseñado» para el encierro del verano pasado en Madrid.

Sin salir del cárdeno, Victorino Martín dirigió su discurso hacia Fandiño para «reconocer todo el mérito de una gesta en Madrid, a principio de temporada y con seis toros que sabe que no se lo van a poner nada fácil; pedimos nuevos alicientes para la Fiesta y el Domingo de Ramos nos los ofrece Iván». Idéntico guión de Joao Folque, propietario de la divisa lusa de Palha, que advierte que «Fandiño se la va a jugar en la primera plaza del mundo y a pecho descubierto», porque «ha querido destacar eligiendo toros que le pondrán problemas y le exigirán una barbaridad». Finalmente, Salvador García Cebada, agradeció «a torero y apoderado el ofrecimiento de estar en una corrida tan especial». «Fue una gran sorpresa y aceptamos encantados, pero sabiendo desde el minuto uno que traeríamos a Madrid con este toro», un colorado bajo y astifino de preciosas hechuras.