«Hipnotízame»: cómo descolocar a los famosos

Chenoa y Rosa, entre otros, participan en el programa que hoy regresa a Antena 3.

La hipnosis, así de entrada, impresiona un poco. Si a eso se añade que la persona es famosa y que, en el proceso, millones de espectadores le van a ver en situaciones delirantes con reacciones que ni ellos mismos se las creen, el resultado es «Hipnotízame». El programa regresa hoy al «prime time» de Antena 3 con tres especiales tras varias entregas en las que ha tenido una media de cuota de pantalla del 17,5 por ciento y 2,5 millones de espectadores. Este formato, producido por Atresmedia Televisión y 7 y Acción –la compañía de entretenimiento de Pablo Motos y Jorge Salvador– está dirigido por Jandro, colaborador habitual de «El Hormiguero 3.0», y la presentación corre por cuenta de Manel Fuentes. La pieza fundamental es el ilusionista e hipnotista Jeff Toussaint. Él pondrá en un brete a Chenoa, Silvia Abril, el cantante David Otero, Adrián Lastra, Santi Rodríguez, Mario Vaquerizo, «El Monaguillo», Mónica Cruz, Rosa y Lorena Gómez, entre otros.

Situaciones desconocidas

«Ha sido fácil convencerles para participar porque nuestra propuesta es divertida, aunque no caemos en propuestas rancias como que hagan la gallina. La prioridad es no colocarles en una posición ridícula, sino que vivan una situación que desconocen», afirma Jandro. Además, juegan en casa; es decir, a cada uno de ellos, tras la sugestión, se les prepara una prueba a su medida. Algunas tienen más carga emocional y otras, «como en el caso de Rodríguez, ‘‘El Monaguillo’’ y Vaquerizo, sí que les llevamos al límite», explica. Pese a que en principio pueda parecer que es un programa con poca labor de intendencia, cada uno de los especiales tarda dos meses en rodarse entre la selección de los participantes, comprobar si son susceptibles o no de ser hipnotizados y el rodaje. Una de las filmaciones más complicadas, y que también va a dejar a la audiencia asombrada, es la que protagoniza el líder de Nancys Rubias. «Nos trasladamos a Tabernas (Almería), donde se rodaron la mayoría de los ‘‘spaghetti western’’ y, tras hipnotizarle, Vaquerizo se despierta en el ‘‘saloon’’. No entendía nada, empezó a bailar con una corista, luego se enfrentó a un tiroteo y terminó encarcelado», cuenta Jandro.

Ése es uno de los más divertidos, pero tampoco faltan los momentos de tensión como la que sufrió Adrián Lastra. El actor no aguanta el frío y tuvo que permanecer en agua helada. «El resultado ha sido espectacular», dice. Jandro entiende que haya personas que muestren su escepticismo ante la hipnosis, aunque precisa que caen en una contradicción. «Pese a que no les convence, son los primeros que rechazan que se les someta a una sesión, por lo cual algo deben de creer... Les recomendaría que vayan a ver un espectáculo en vivo de Toussaint y que prueben la experiencia».