Estados Unidos

Un temporal deja al menos 12 muertos y muchos daños a su paso por Texas y Oklahoma

Un hombra pasa junto a los destrozos provocados por el temporal en Río Blanco, en el a´rea de Wimberley, Texas
Un hombra pasa junto a los destrozos provocados por el temporal en Río Blanco, en el a´rea de Wimberley, Texaslarazonfreemarker.core.DefaultToExpression$EmptyStringAndSequenceAndHash@e4c5a58

Las tormentas que han azotado durante los últimos tres días los estados de Texas y Oklahoma han dejado miles de viviendas destruidas y un balance provisional de 12 muertos, que se teme pueda aumentar según prosigue la búsqueda de una docena de desaparecidos.

Las tormentas que han azotado durante los últimos tres días los estados de Texas y Oklahoma han dejado miles de viviendas destruidas y un balance provisional de 12 muertos, que se teme pueda aumentar según prosigue la búsqueda de una docena de desaparecidos, informa Efe

La ciudad de Houston amaneció hoy totalmente inundada tras una noche de fuertes tormentas que dejaron dos muertos en la urbe, cerca de 60.000 abonados sin energía eléctrica y unos 500 rescates, según informó hoy su alcaldesa, Annise Parker.

Muchos de los rescates fueron en las autopistas que bordean la ciudad, de hecho un tercer cuerpo fue encontrado esta mañana en el interior de un vehículo en la interestatal 45.

Además, decenas de personas quedaron atrapadas y han pasado la noche en el Toyota Center, el pabellón en el que los Houston Rockets ganaron a Golden State Warriors en un partido de la NBA el lunes por la noche.

En Houston se suspendieron las clases de más de 215.000 estudiantes este martes.

Por otro lado, la Oficina de Emergencias del condado de Hays, en el centro de Texas, uno de los más afectados por las tormentas, informó hoy de la muerte de un hombre a causa de las inundaciones.

Precisamente en el condado de Hays, los equipos de rescate buscan a una docena de personas, la mayoría familias que pasaban las vacaciones en la localidad de Wimberley, que desaparecieron tras la crecida del río Blanco.

"Hay calles enteras en las que solo quedan una o dos casas en pie, mientras que del resto solo quedan ruinas", explicó Kharley Smith, la coordinadora de gestión de emergencias del condado, al concretar que unas 70 viviendas han sido destruidas y unas 1.400 reportan daños de diversa índole.

Hay otras 30 personas cuyos amigos y familiares no han logrado contactar, aunque aún no se consideran desaparecidos.

También en Texas, las autoridades informaron de la muerte este domingo de un hombre de avanzada edad en el condado de Milam cuando un tornado destruyó su casa prefabricada, la de un joven de 14 años al que encontraron en un colector de aguas pluviales en DeSoto y la de una joven de 18 en Devine cuyo vehículo fue arrastrado por el agua cuando se dirigía a su casa después de su fiesta de graduación.

Finalmente, una persona murió el sábado en San Marcos (Texas) por la crecida del río Blanco.

El gobernador de Texas, Greg Abbott, declaró el lunes el estado de emergencia en 24 condados por los tornados, que se suman a otros 13 que ya lo habían sido a principios de mes.

Hoy, el presidente estadounidense, Barack Obama, mostró su apoyo a Abbott y le ofreció recursos federales para paliar los daños del temporal.

"Le he prometido que puede contar con el Gobierno. Ya tenemos personal en tierra y están coordinando con las autoridades en Texas para responder a sus peticiones", dijo.

Por su parte, en el vecino estado de Oklahoma, las autoridades reportaron la muerte de cuatro personas entre el fin de semana y este lunes.

Una mujer murió en su vehículo en Tulsa después de que la corriente la arrastrara, en Sapulpa falleció un hombre a causa de las tormentas, otra mujer murió en Blue cuando un tornado arrasó su casa prefabricada y, finalmente, un bombero perdió la vida en Claremore cuando trataba de rescatar a otras personas.

Las lluvias torrenciales que llevan cayendo sobre Texas desde hace tres semanas han puesto fin a una sequía de casi cinco años en el estado de la estrella solitaria, llenando lagos y reservas de agua. EFE