Ciencias naturales

El Ártico se ilumina a 30 metros bajo el hielo con pequeños organismos brillantes

Durante las noches polares, a causa de unos organismos marinos bioluminiscentes

El hielo ártico, visto desde el espacio
El hielo ártico, visto desde el espaciolarazon

Pequeños organismos marinos bioluminiscentes se convierten en la fuente de luz dominante 30 metros bajo la superficie del océano Ártico en las noches polares y ayudan a peces y aves marinas a encontrar alimento en las épocas de oscuridad invernal casi continua, según un estudio realizado por científicos de la Universidad de Delaware (Estados Unidos). El estudio, publicado en la revista ‘Scientific Reports’ y recogido por Servimedia, indica que 30 metros bajo la superficie del Ártico es una profundidad crítica para la actividad ecológica en las noches polares de esta parte del planeta porque a esa distancia disminuye la luz atmosférica y toma el relevo la bioluminiscencia de determinados organismos marinos de zooplancton. Los investigadores estudiaron cuánta actividad biológica se produce en las noches polares del Ártico desde 2012, cuando Mark Moline, director de la Escuela de Ciencias y Políticas Marinas de la Universidad de Delaware, y colegas noruegos y escoceses comenzaron a explorar cómo la vida marina se enfrenta a la continua oscuridad invernal en Svalbard (Noruega). El pensamiento científico predominante hasta entonces era que la red alimentaria permanecía inactiva durante las noches polares. El estudio indica que a medida que aumenta la profundidad crece la cantidad de bioluminiscencia en la columna de agua y cambia la composición de la comunidad de zooplancton. «A medida que te adentras en el agua, vemos menos dinoflagelados y más copépodos, krill y ctenóforos, que emiten una luz bioluminiscente más brillante», dijo Jonathan Cohen, profesor de la Universidad de Delaware que se unió al equipo de investigación en 2013. Este cambio de la comunidad no está asociado con ninguna condición física del agua, sino con la llamada ‘profundidad de compensación de bioluminiscencia’, esto es, el punto de transición en el que la luz atmosférica disminuye en la columna de agua y la bioluminiscencia toma el relevo.

El hallazgo del estudio es importante porque el mar de Barents, al sur de Svalbard (Noruega), es una zona pesquera de importancia mundial y los pescadores de la región están interesados en entender cómo los cambios en el zooplancton afectarán a especies de peces comercialmente importantes como el bacalao y el arenque. «Cuando el cielo se pone más brillante al mediodía durante el período nocturno polar hay más luz atmosférica disponible bajo el agua para los depredadores que durante la noche, por lo que los organismos marinos como los copépodos se retiran más abajo en la columna de agua, donde es más oscuro «, dijo Cohen. Los investigadores abordaron este tema tomando mediciones de la luz atmosférica y de la biolumniscencia en el agua en 2014 y 2015, así como las especies planctónicas que producen luz. Luego, Heather Cronin, Cohen y Moline crearon un balance de protones para medir cuánta luz proviene de la atmósfera y cuánta de dentro del agua con organismos brillantes. La bioluminiscencia juega un papel importante en ayudar a los organismos marinos a evitar depredadores e incluso a esconderse en el sitio plano. Cohen apunta que el krill y algunos peces utilizan la luz bioluminiscente adicional de los copépodos para encontrar alimento. «Sabemos por el análisis del contenido intestinal que los peces y las aves marinas están activos y se alimentan en los fiordos de Svalbard durante la noche polar. Nuestra investigación sugiere que la luz bioluminiscente puede ser una de las maneras en que encuentran alimento en la oscuridad», concluye.