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Así quedaron la rueda y el motor del avión que aterrizó de emergencia en Barajas
La aeronave de Air Canadá tuvo que sobrevola el espacio aéreo durante más de cuatro horas quemando combustible para perder peso y poder descender.
Fueron horas de nervios y tensión en el aeropuerto Adolfo Suárez-Madrid-Barajas. Después de que se cerrara el espacio aéreo por la presencia de drones en las inmediaciones del aeródromo madrileño, llegó la información de un vuelo de Air Canadá que tenía problemas. Acababa de despegar de Madrid con casi dos horas d retraso con destino Toronto, pero durante el despegue se escuchó un fuerte golpe. Una de las ruedas de tren de aterrizaje reventó y varios fragmentos del neumático acabaron en uno de los motores. el piloto alertó a la torre de lo sucedido casi de manera inmediata. El problema es que el avión estaba cargado de combustible para cruzar el Atlántico y necesitaba perder peso para volver a tocar tierra.
Muchos fueron los madrileños que vieron el avión volar bajo. Estuvo cuatro horas dando vueltas entre Cuenca y Toledo, la aeronave, un Boeing 767-300 no dispone del mecanismo para lanzar combustible, por lo que tenía que volar hasta encontrar la situación idónea para volver a la pista. Los controladores trabajaron a contrarreloj para encontrar espacio aéreo para que el avión pudiera seguir en el aire sin problemas.
Para vigilar que todo estaba en orden, un caza F-18 del Ejército del Aire vigilaba el avión de cerca. A bordo, había 130 personas y el comandante logró que todos mantuvieran la calma en todo momento.
Finalmente, a las 19:07 el avión aterrizó sin incidencias, con una rueda y parte del tren de aterrizaje controlado. Los pasajeros y miembros de la tripulación abandonaron la nave ilesos y nadie tuvo que ser atendido por ataques de ansiedad a pesar de lo delicada de la situación. El aterrizaje se realizó con éxito en la pista 32L -bloqueada por la aeronave y medios de emergencia- y fue supervisado por al menos seis dotaciones de bomberos de la Comunidad y otras tantas del Ayuntamiento, además de personal sanitario del servicio municipal y regional de urgencias (Samur y Summa).
El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana anunció la puesta en marcha de una comisión de investigación de accidentes para aclarar lo ocurrido, tras haber tomado muestras en la pista, con lo que ya has abierto el correspondiente expediente.
Lo ha anunciado el ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, que ha celebrado que “todo haya concluido felizmente”, ha sido felicitado por su pericia al piloto y la tripulación y ha compartido el sentimiento de “angustia” que hayan tenido pasar los pasajeros y sus familiares. El ministro se trasladó a Barajas para seguir de cerca el aterrizaje de emergencia.
También el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, destacó que todos los profesionales del Aeropuerto de Barajas, los servicios de emergencia y las fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado “están preparados y altamente capacitados para la seguridad en este tipo de incidencias”.
La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, estuvo muy pendiente de la situación con el consejero de Justicia, Interior y Víctimas, Enrique López, que estaba en Barajas junto con el director de la Agencia de Seguridad y Emergencias Madrid 112, Carlos Novillo.
El presidente del Sindicato Español de Pilotos de Líneas Aéreas (Sepla), Oscar Sanguino González, valoró “la profesionalidad de pilotos, servidores, Cuerpos de Seguridad del Estado, servicios sanitarios y personal del aeropuerto” tras una “dura jornada en Barajas” . “Todo ha salido bien y no tenemos que lamentar daños personales. Enhorabuena a todos”, confirmó Sanguino respecto a una operación que, a plena vista, ha realizado como si de un aterrizaje normal se tratara.
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