Europa combate la covid-19 con la mascarilla

El uso obligatorio de las mascarillas en Europa se está convirtiendo en los últimos días en la tónica general ante la escalada de nuevo del coronavirus. Las nuevas reglas sobre el uso de mascarillas en Inglaterra entraron en vigencia el viernes, y ahora las personas que van de tiendas, bancos y supermercados deben usar protectores faciales, mientras que en Rumanía reportó un récord de infecciones diarias y los casos nuevos casi se duplicaron en Francia. En Inglaterra, como en algunos lugares de España, la multa por ir sin mascarilla es de 100 libras. Sin embargo, lugares como restaurantes, pubs, gimnasios y peluquerías están exentos de su uso. John Apter, presidente nacional de la Federación de Policías de Inglaterra y Gales, dice que los oficiales estarán disponibles como último recurso, pero que espera que el público “continúe haciendo lo correcto” para proteger a otros ciudadanos.

En Bélgica, las autoridades de salud comunicaron que una niña de tres años murió después de dar positivo por Covid-19, ya que las nuevas infecciones aumentaron en un 89% desde la semana anterior. El jueves, las autoridades belgas reforzaron las restricciones para frenar la propagación del coronavirus, incluida la obligatoriedad de mascarillas en espacios públicos al aire libre abarrotados. Bélgica ha sido duramente azotada por la pandemia con 64.847 casos y 9.812 muertes registradas hasta el momento.

En general, Europa ha padecido más de 201.000 muertes en la pandemia, según un recuento de la Universidad Johns Hopkins. Rumanía estableció el viernes un récord histórico de nuevas infecciones diarias y las autoridades atribuyeron el aumento al no uso de la mascarilla. Muchos en Rumania no han usado mascarillas en interiores o en transporte público. La relajación de las medidas también despojó a las autoridades de la capacidad de poner en cuarentena o aislar los nuevos casos o mantener a los pacientes con Covid-19 en hospitales. Más de 4.500 pacientes abandonaron rápidamente sus hospitales.

Francia también está viendo un aumento en el número de casos, con más de 1.000 nuevas infecciones reportadas el jueves, mientras la gente baja la guardia antes de las vacaciones de verano del país. Las autoridades de salud dicen que los casos en el continente francés han aumentado un 66% en las últimas tres semanas y un 26% solo en la última semana. Las preocupaciones sobre el aumento de los casos ya habían llevado al Gobierno a hacer obligatorio el uso de las mascarillas en todos los espacios públicos cerrados esta semana.

En Italia, las nuevas infecciones reportadas el jueves aumentaron a más de 300, la primera vez que habían superado ese número desde mediados de junio. La mayoría de los casos nuevos provienen del norte de Italia, donde comenzó el brote en Europa, pero las regiones del sur últimamente han estado viendo grupos de infecciones. Muchos casos recientes se remontan a personas que regresan del extranjero, la mayoría de ellos trabajadores extranjeros. Otros grupos se encontraban entre los emigrantes rescatados en el mar y los turistas.

La semana pasada, el alcalde de la isla turística de La Meca, Capri, ordenó a las personas que usaran mascarillas mientras caminaban por las calles. La plaza principal de Capri, con sus cafés de moda y sus calles estrechas, estaba abarrotada de visitantes, muchos de los cuales no llevaban máscaras.

Tres jóvenes romanos que regresaron a casa después de unas vacaciones dieron positivo, dijeron el viernes medios italianos. En Italia, las mascarillas deben usarse en tiendas, bancos, iglesias, en el transporte público y en todos los lugares donde es imposible mantener una distancia segura, incluso al aire libre. En medio de los temores en España de que las malas condiciones de vida de los trabajadores agrícolas estacionales están creando puntos críticos de coronavirus, el ministro de Agricultura de España ha asegurado que las autoridades están presionando a los empleadores para que proporcionen alojamiento y transporte decentes para los trabajadores. El Ministerio de Salud informó 971 nuevas infecciones diarias, el mayor aumento diario desde que terminó el estado de alarma de España.

Algunos grupos en Europa se han relacionado con los lugares de trabajo, incluidos los mataderos en Alemania. Las autoridades han vinculado más de 2.000 casos al brote en el matadero de Toennies en la ciudad de Rheda-Wiedenbrueck, en el oeste de Alemania, que llevó el mes pasado a un cierre local parcial. La compañía que dirige el matadero dijo que 30 empleados más dieron positivo, pero la mayoría de ellos eran casos antiguos.

Rusia, que detuvo todos los vuelos internacionales y cerró sus fronteras a fines de marzo para detener el brote, está reanudando los vuelos internacionales a partir del 1 de agosto con solo tres países: Gran Bretaña, Turquía y Tanzania, mientras el gobierno trabaja para expandir la lista.

A principios de este mes, Rusia no hizo la lista de países cuyos ciudadanos pueden viajar a países de la Unión Europea. Hasta ahora, los funcionarios de salud de Rusia han reportado más de 800,000 casos confirmados y 13,046 muertes. Y mientras los científicos de todo el mundo buscan una vacuna para detener la pandemia, el primer ministro del Reino Unido, Boris Johnson, ha desestimado a los activistas que buscan oponerse a las vacunas como “locos”. Johnson estaba promoviendo una campaña para la vacunación contra la gripe antes del invierno. Gran Bretaña tiene el peor número de pandemias registrado en Europa con más de 45,600 muertes.