Con café, miel y otros trucos para fabricar sangre falsa

¿Sabías que con un poco de creatividad y algunos artículos comunes, puedes crear sangre y heridas falsas para Halloween? En este artículo, te mostraremos diversas técnicas para lograr efectos escalofriantes y realistas que darán vida a tu disfraz en la noche más espeluznante del año. Nadie podrá resistirse a tu "truco o trato":

¿Cómo fabricar sangre falsa? Si buscas algo más sofisticado que el típico Betadine, que a menudo resulta poco realista, prueba estas formas de hacer sangre falsa, muchas de las cuales utilizan ingredientes comunes que puedes encontrar en casa, como gel, miel, café o kétchup.

Sangre falsa con gel de ducha y colorante

Para crear una sangre falsa de calidad, necesitarás gel transparente para el cabello (también sirve el champú), al cual deberás agregar colorante alimentario rojo. Agrega unas gotas de colorante azul para obtener un aspecto más realista.

Con sirope de chocolate

Esta opción sencilla para fabricar sangre falsa para tu disfraz de Halloween implica usar sirope de chocolate y colorante alimentario. Simplemente mezcla el sirope de chocolate con colorante alimentario rojo y azul para obtener una sangre espesa y oscura.

Con miel de abeja

Otra alternativa es utilizando miel de abeja. Es un proceso muy simple: vierte la miel en un tarro mediano, llenándolo hasta la mitad. Agrega una cucharada y media de agua para reducir la densidad y mezcla bien. Luego, añade colorante comestible rojo a la mezcla. Si deseas que la sangre tenga un aspecto más realista, agrega unas gotas de colorante comestible verde. Si prefieres, también puedes añadir un poco de sirope de fresa a la mezcla para darle un sabor delicioso a tu sangre falsa de Halloween.

Café para fabricar sangre falsa

Comienza disolviendo una cucharada de café en un poco de agua y reserva la mezcla. Luego, hierve una taza de agua y, cuando empiece a hervir, agrega una taza de harina. Mezcla hasta obtener una pasta sin grumos. A continuación, añade gradualmente colorante rojo comestible a la mezcla, ajustando la cantidad hasta obtener el tono de rojo deseado. Continúa revolviendo los ingredientes a fuego lento durante unos minutos. Finalmente, retira la mezcla del fuego y agrega el café reservado poco a poco, mezclando hasta que la "sangre" adquiera un tono oscuro y realista.