Un transexual busca la eutanasia tras la cirugía de cambio de sexo

Una mujer transgénero llamada Louis Cardinal ha lanzado fuertes críticas contra el sistema de salud canadiense por rechazar su solicitud de eutanasia debido al dolor que experimenta tras una cirugía de cambio de sexo. Cardinal, quien se sometió a una vaginoplastia en 2009, ha experimentado complicaciones desde entonces y continúa sufriendo presión constante, dolor y molestias. En un mensaje compartido en redes sociales, reveló que el dolor de la cirugía era tan insoportable que, en enero, solicitó la inyección letal como una salida.

Este caso ha llevado a Louis Cardinal a considerar la negativa del sistema de salud canadiense como una violación de sus derechos humanos. Cardinal ha anunciado su intención de volver a solicitar la eutanasia en los próximos meses si no recibe ayuda para aliviar su dolor.

El sistema de salud canadiense se encuentra en el centro de esta controversia, ya que es uno de los más permisivos del mundo tanto para la eutanasia como para la afirmación del género elegido por un individuo. Sin embargo, desde la clínica donde Cardinal solicitó la eutanasia, afirman que no cumple con los requisitos necesarios para ser elegible. Según la clínica, la eutanasia solo está destinada a quienes padecen enfermedades incurables o discapacidades, ya que existen opciones para mitigar el dolor asociado con la cirugía de cambio de sexo. Cardinal argumenta que la eutanasia es su única opción, ya que la crema anestésica recetada no ha logrado aliviar el dolor causado por su "nueva vagina".

Esta situación ha avivado el debate sobre la liberalización de las leyes de eutanasia en Canadá desde 2021. Los opositores argumentan que esto ha abierto la puerta a un aumento alarmante en las solicitudes de eutanasia, como la de Cardinal, en lugar de limitarse a pacientes con enfermedades terminales. Según datos, el año pasado se registró un récord estimado de 13,500 suicidios respaldados por el estado, en comparación con los 10,064 en 2021.

Además, un estudio reciente de la Universidad de Florida y Brooks Rehabilitation ha revelado que cuatro de cada cinco personas que se sometieron a una cirugía de cambio de sexo en los últimos cinco años experimentaron dolor prolongado después de la cirugía. El 57 % informó que las relaciones sexuales se volvieron una experiencia dolorosa después de la operación.