Diputados cubanos debaten por la aprobación de nuevas leyes

(AP). Los diputados cubanos realizaron el miércoles su primer plenario del año con el objetivo de aprobar cuatro leyes sobre el funcionamiento de varios de los nuevos actores del sistema político puesto en marcha el año pasado.

Con la presencia del primer secretario del Partido Comunista de Cuba (PCC) y exgobernante Raúl Castro y del actual mandatario Miguel Díaz-Canel, ambos también legisladores, más de 500 parlamentarios participaron a la cita de manera virtual siguiendo las normas sanitarias para impedir la propagación del nuevo coronavirus.

La última vez que los diputados se reunieron fue en diciembre de 2019 cuando se juramentó al Primer Ministro, Manuel Marrero, como parte de una reforma por la cual se creó este cargo, el de gobernador provincial y varios otros y se le dio un nuevo giro a la primera magistratura, que mantuvo Díaz-Canel.

La constitución vigente desde abril de 2019 rediseñó los puestos del Ejecutivo y el Legislativo para quitarle el fuerte toque personalista de las anteriores décadas lideradas por Fidel Castro, pero sin que esto implicara cambios de fondo en el modelo socialista y unipartidista.

Las leyes que aprobaron ahora los diputados y que fueron vistas antes en comisiones son la del servicio exterior, la organización del Consejo de Ministros, la del presidente y vice de la república y la de revocación de los cargos públicos.

Las nuevas normas buscan “adaptar la nueva legislación al marco constitucional y el surgimiento de nuevos actores como los gobernadores y vicegobernadores”, explicó recientemente José Luis Toledo, de la Comisión Constitucional de la Asamblea Nacional del Poder Popular (ANPP), el Parlamento de la isla.

Cuba ya tenía una ley de revocación de cargos públicos vigente desde 1999 por lo que esta es sólo una readecuación.

En Cuba, donde el único partido legal es el PCC -que no puede proponer de manera directa a sus candidatos- el Parlamento se conforma por personas elegidas en los barrios y municipios por sus compatriotas y otros designados por una Comisión de Candidaturas con organismos afines al gobierno.

La nueva constitución cubana incorporó la existencia de la propiedad privada, la doble nacionalidad y el reconocimiento de derechos, por lo que unas 39 leyes y 31 decretos deberán ser adecuados antes de que termine el ciclo de esta ANPP en 2023.

Entre las normas para reconsiderar están, por ejemplo, una ley de vivienda, otra de salud, otra de empresas, un Código Penal y otro de Familias.

El plenario de los diputados sirvió también para sacar adelante algunas cuestiones atrasadas como el presupuesto nacional y una rendición de cuentas de las acciones para el combate a COVID-19, un tema en el cual Cuba tuvo un relativo éxito en su control hasta ahora.