La dirección nacional del partido no ha sido convocada a la reunión

Se cumple una semana de la crisis abierta en Podemos tras el golpe de Íñigo Errejón a su secretario general, Pablo Iglesias, tras desvelar su plan a escondidas para presentarse a la Comunidad de Madrid bajo el paraguas de la plataforma de Manuela Carmena, y a día de hoy no hay cauces para que el cisma entre ambos se diluya, máxime escenario se vería en las elecciones autonómicas, compitiendo a un candidato de Podemos contra Íñigo Errejón. Es por ello que mañana hasta ocho barones del partido se reunirán en Toledo para pedir a la dirección nacional “unidad” para resolver el cisma abierto en Madrid.

Una reunión a la que no ha sido convocada la dirección nacional del partido y a la que se espera la asistencia los líderes de Podemos en Castilla-La Mancha, José García Molina -muy cercano a Pablo Iglesias-, Euskadi (Lander Martínez), Aragón (Nacho Escartin), Comunitat Valenciana (Antonio Estañ), Murcia (Oscar Urralburu), La Rioja (Kiko Garrido), Baleares (Mae de la Concha) y Canarias (Noemí Santana). A pesar de que la dirección de Podemos no esté invitada a la cita, fuentes de la dirección nacional señalan a LA RAZÓN que “tenemos conocimiento de esta reunión y estamos en un momento de hablar mucho”.

La cita coincide justo una semana después de que la cúpula nacional convocara a todos los secretarios generales autonómicos en Madrid para abordar los preparativos de cara a las elecciones autonómicas, y en la que inevitablemente se expusieron las dudas y temores sobre el pulso abierto por Íñigo Errejón a Pablo Iglesias. El objetivo de esta reunión, sería -por tanto- continuar con el debate que se habría quedado corto en la exposición del pasado sábado en Madrid, a pesar de que en general todos los cargos se alínean con la dirección nacional y entienden el calado de la cuestión: el cómo ha dejado a la dirección el plan urdido por Errejón. Hasta el día de hoy no hay ningún secretario autonómico de Podemos que haya manifestado su apoyo al ex número dos de Podemos, ni tampoco ninguna rebelión en contra de la carta en la que Pablo Iglesias situaba fuera de Podemos al ex diputado, en cuanto a los cargos orgánicos se refiere.

Sin embargo, esta reunión se produce justo en la primera semana tras la “operación olvido” que el partido ha iniciado para tratar de superar y pasar página el golpe de Errejón. Los líderes autonómicos tratarán de lanzar un alegato a la unidad para que no se produzca la imagen de “competición” entre el ex diputado y Podemos en la Comunidad de Madrid. Dos candidaturas podrían perjudicar los resultados electorales en la capital, y es lo que a grosso modo, los barones autonómicos tratarán de evitar.