Andalucía

Seriedad bajo la manta de agua

El Betis golea al Antoniano (0-4), con Lainez como hombre más destacado, en un Villamarín anegado por el diluvio

Betis - CA Antoniano
GRAF2108. SEVILLA, 19/12/2019.- El delantero del Real Betis Balompié Cristian Tello (i) celebra junto a su compañero Borja Iglesias (d) su gol marcado de penalti, el primero del equipo, durante el partido ante el Club Atlético Antoniano correspondiente a la primera ronda de la Copa de S.M el Rey, celebrado este jueves en el estadio Benito Villamarín de Sevilla. EFE/ Raúl CaroRaúl CaroEFE

Luis Rubiales le echó un buen cable al Betis con su decisión de no permitir que el Antoniano lo recibiese en el Municipal de Lebrija. Con el temporal «Elsa» azotando la pronvincia de Sevilla con furia monzónica, un duelo sobre la pista de patinaje en la que se convierte el césped artificial cuando se moja habría sido una trampa mortal. Al calor del Benito Villamarín, los muchachos de Rubi resolvieron el pase sin florituras pero sin apuros. Era lo que requería la tarde de perros. En este primer párrafo, es obligatorio destacar también el trabajo de los jardineros heliopolitanos, que lograron que el campo estuviese mediamente practicable durante casi todo el encuentro. El último cuarto de hora, eso sí, se disputó dentro de una piscina.

Las ganas de agradar de Diego Lainez, que progresa lentamente desde que arrecian los rumores sobre su salida, fueron lo más potable de un encuentro demasiado determinado por la manta de agua que estuvo cayendo desde una hora antes del comienzo. El mexicano caracoleó en el área hasta ser objeto de penalti al cuarto de hora y permitió que Tello abriese el camino de la clasificación desde los once metros. Fue llamativa la discusión entre el extremo catalán y Borja Iglesias, que quería engordar una estadística que no justifica la enorme inversión realizada para ficharlo. También había ganas de ver a Dani Martín, inédito desde su pésima tarde en el Camp Nou, y la verdad es que el chaval no tranquilizó. Al contrario, la ocasión más clara del Antoniano fue un mal despeje del portero astuariano que quedó a pies de Romás, demasiado generoso al intentar servir a Ranchero en vez de chutar sobre la meta desguarnecida. En las postrimerías de la primera parte, Dani Martín se desquitó, más o menos, al meter los puños en una falta violentamente sacada por Juanjo.

La única aparición reseñable de Borja Iglesias, que no tenía su mejor semblante cuando Loren lo suplió, fue el pase a Kaptoum en el segundo gol, una descarga en pared a la espalda de los defensores para que el camerunés definiese con mucha calidad al palo largo. El autor del segundo tanto parece más cómodo como interior que como pivote, función que cumplimentó Javi García, pero no termina de marcar diferencias ni siquiera ante adversarios de Tercera. Estos dos centrocampistas encarnan el enorme problema que tiene Rubi en esa demarcación que urge reforzar. Tras el descanso, el terreno de juego empezó a deteriorarse hasta ponerse peligroso y los equipo firmaron una especie de armisticio durante el que siguió brillando Lainez, que provocó una falta al borde del área y la transformó con un sutil toque a la escuadra. El joven mexicano se une a una nómina de lanzadores de golpes francos asombrosa, en la que destacan Tello, Canales o Joaquín, entre otros. Rubi tuvo el detalle de hacer debutar en el tramo final al mediocentro de 20 años Alejandro Meléndez, que honró su primer partido con un gol. El utrerano se animó en una incorporación ofensiva y definió con temple tras un buen pase de Barragán. A eso se le llama aprovechar una oportunidad.