Coronavirus

Andalucía hará cribados masivos en once municipios y restringe las entradas y salidas a Casariche

La Junta estudia jurídicamente cómo obligar a que se reduzca de 10 a seis el máximo de personas que podrán reunirse en el ámbito familiar

La desazón de conocer que no se sabe va ligada a la pandemia, pero hay que avanzar. Por eso, el Ejecutivo andaluz ha aprobado este martes en Consejo de Gobierno aplicar una nueva “medida excepcional” como es el cribado masivo de test rápidos en once municipios de la comunidad donde la incidencia de la Covid-19 ha sido superior a los 500 casos por 100.000 habitantes en las últimas dos semanas. Además se ha decidido restringir las salidas y entradas en el municipio sevillano de Casariche de poco más de 5.500 habitantes durante los próximos 14 días, al no haberse podido controlar aún la expansión de la enfermedad. Aunque habrá excepciones como para dirigirse a centros sanitarios o educativos, o para la realización de exámenes o alguna prueba oficial, entre otras cuestiones, según han explicado los consejeros de la Presidencia y de Salud, Elías Bendodo y Jesús Aguirre, respectivamente.

Los test de antígenos se llevarán a cabo en Pulpí, en Almería; en Almodóvar del Río, en Córdoba; en Jaén, en las localidades de Jamilena, Los Villares y Linares; en Sevilla en La Campana, Villaverde del Río, Arahal y Paradas; y en Málaga en Sierra de Yeguas y en Villanueva de la Concepción. A los ayuntamientos a los que se les traslade que han sobrepasado los 500 casos, podrán tomar dentro de sus competencias las iniciativas que estimen, aunque el paquete, que puede incluir cerrar parques, mercadillos, o limitar los horarios en hostelería, por ejemplo, tendrá que ser aprobado por el delegado territorial de la Consejería de Salud, según la Junta.

En el municipio cordobés de Lucena, donde el coronavirus también se desbocó, la evolución es “altamente positiva”, según han aseverado los consejeros, por lo que no se limitará en él la movilidad.

Más allá de esos focos, Aguirre ha explicado que la diferencia entre la primera y la segunda ola es que mientras en la anterior lo importante era el número de positivos para seguirle la pista al coronavirus, en ésta lo es el de camas ocupadas, “la atención a nivel sanitario”. Ha anotado que en la actualidad, “el 80%” de los contagios “se dan en el ámbito familiar”, de ahí que el Gobierno autonómico haya optado por reducir de 10 a seis el máximo de personas que puedan participar en reuniones de familiares y amigos, si no son convivientes. Según el consejero de Salud, estudian con el gabinete jurídico cómo pasar en ese punto de la recomendación a la obligación, aunque ha admitido que es “muy difícil” controlarlo.

Se mantienen las mismas restricciones que había para bodas, bautizos y comuniones, aunque el Gobierno regional no descarta novedades, si la crisis sanitaria se recrudece. De momento, los andaluces confinados en sus domicilios con diagnóstico positivos son 11.555 y 26.321 se encuentran en aislamiento preventivo a la espera de resultados.

Casi el 96% de las residencias libres de covid

De la siembra de datos que ha hecho el titular de Salud se puede destacar, asimismo, que el 95,9 por ciento de las residencias que existen en la comunidad “están libres de positivos”. Ocho de esas instalaciones se han medicalizado y la Junta ha puesto en marcha cuatro centros de evacuación para trasladar a los negativos cuando sea necesario, ubicados en Granada, Sevilla, Málaga y Cádiz.

En los márgenes de la pandemia, “se han hecho 26.879 denuncias”, la mayoría de ellas ligadas al no uso de mascarillas en espacios públicos. 17.434 han sido gestionadas por la Policía Local y 6.099 por la Guardia Civil.