Ganadería

Dos caballos de Peralta vuelven a triunfar en SICAB

La ganadería equina resultó campeona en Equitación de Trabajo y en Alta Escuela

Rafael Peralta posa junto a Quedado AP II, ganador de Alta Escuela en 2018
Rafael Peralta posa junto a Quedado AP II, ganador de Alta Escuela en 2018Carlos NúñezLa Razón

La VI edición del Campeonato del Mundo de Pura Raza Española del Salón Internacional del Caballo (SICAB), que se clausuró el día 18 de octubre y que se desarrolló a puerta cerrada durante dos semanas en FIBES, acabó con un nuevo éxito de la ganadería andaluza de los hermanos Peralta.

Dos caballos resultaron campeones en la modalidad de Doma –o Equitación– de Trabajo y en Alta Escuela. La Doma de Trabajo es una disciplina que nace de la fusión de la doma de campo que se hacía tradicionalmente en España, Portugal, Francia e Italia. Esta modalidad cuenta con tres pruebas: doma, velocidad y manejabilidad. En otras palabras, esta prueba, que cada año adquiere más importancia en el SICAB y en la que destacan los pura raza españoles, los caballos tienen que demostrar en pista cómo ejecutarían el trabajo de campo con ganado en una situación real.

El jinete José Antonio Olea Rodríguez, a lomos del caballo Ilustre AP IV, se hizo con la Medalla de Oro y Copa Ancce en Equitación de Trabajo en el nivel inicial. El caballo AP IV consiguió excelentes puntuaciones en la prueba de Doma y en Manejabilidad, con un 68,4 y 70,6 por ciento respectivamente. Estas calificaciones lo hicieron directamente ganador, al situarse en un indiscutible primer puesto, antes de realizar la prueba de velocidad, en la que también mostró su liderazgo.

El otro premio obtenido por la ganadería Peralta ha sido en Alta Escuela. En esta modalidad, los jinetes –que suelen llevar un sombrero rondeño– tienen que realizar una serie de ejercicios para demostrar las capacidades del caballo como la confianza, su psicología y el desarrollo de sus elementos motores. El animal y el jinete tienen que mostrar al jurado que en conjunto conforman una gran armonía en todas las modalidades de pruebas como el paso español, la parada, el trote, el balanceo, el galope o, entre otros, el paso atrás.

En este contexto, el caballo Jade AP V y el jinete José Antonio Asencio consiguieron la Medalla de Oro y Copa Ancce en Alta Escuela nivel medio. El jinete ha confirmado en SICAB el gran momento que atraviesa con Jade AP V, compitiendo al máximo nivel y consiguiendo medias que rozaron el 70 por ciento, quedando primero en la Prueba Técnica y en la Kür.

Así las cosas, estos dos galardones vuelven a confirmar el liderazgo de la centenaria ganadería de los hermanos Peralta después de que hace un par de años se hicieran con el primer premio de Alta Escuela, Equitación de Trabajo – ambos en nivel medio– y Doma Clásica, que es deporte olímpico. De hecho, que una ganadería gane en un mismo campeonato dos o tres modalidades distintas es algo que no ocurre casi nunca, pero los caballos de Peralta, tras muchos años de selección y cuidado, han vuelto a demostrar su valía.

Rafael Peralta, hijo de Rafael y sobrino de Ángel Peralta, los hermanos que fundaron la ganadería, asegura que el éxito que ahora cosechan no es más que el resultado de «muchos años de selección encaminados a que los caballos sean útiles y funcionales». En este sentido, afirma que no se han dejado llevar por las modas y, frente a los que se decantaron por criar caballos «grandes», ellos se centraron en seleccionar cuidadosamente caballos que destacaran por su «funcionalidad, corazón, versatilidad y utilidad» porque la base del criterio de estos hermanos «siempre se encontró en el rejoneo». Gracias a esta iniciativa y al trabajo desarrollado durante décadas, los caballos de Peralta han demostrado que valen tanto para la Alta Escuela como para la Doma Clásica o la Doma Vaquera. Este último galardón es para Rafael hijo, el actual representante de la ganadería, «la gratificación de que el trabajo de la selección genética y la dedicación plena» de su padre y su tío, que «dieron sus vidas por los caballos», han dado lugar a un «sello especial y distinto» que hacen que los caballos de Peralta sean conocidos en todo el mundo.