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Covid-19

La Junta sopesa cerrar los bares en las provincias más afectadas por la covid

Moreno recuerda que las comunidades autónomas no pueden decretar el confinamiento domiciliario e insta a «no llegar tarde» con las medidas porque «se acerca la campaña de Navidad»

El presidente de la Junta, Juanma Moreno, en el Hospital Universitario de Puerto Real
El presidente de la Junta, Juanma Moreno, en el Hospital Universitario de Puerto RealJesús Morón (Junta de Andalucía)Jesús Morón (Junta de Andalucía)

No será hasta el domingo cuando el presidente de la Junta, Juanma Moreno, anuncie las nuevas restricciones que se aplicarán en Andalucía ante el avance de la covid. Lo hará tras conocer las indicaciones del comité de expertos, aunque ha avanzado algunas ideas sobre la dirección que tomarán las medidas. En este sentido, confirmó que «está sobre la mesa» el cierre de los negocios de hostelería y restauración en las provincias donde la pandemia esté azotando con más virulencia. «No se puede tomar una decisión estándar, sino que hay que singularizarla en función de la incidencia», señaló en declaraciones a TVE, recogidas por Europa Press.

Moreno reconoció que es «muy triste» tener que «cerrar» la hostelería, un sector económico fundamental en Andalucía y en España y que ha tomado medidas «muy serias y sensatas». Junto a ello, insistió en que mientras no haya una vacuna y un tratamiento eficaz hay que tratar de limitar la movilidad del ciudadano. «Tenemos que evitar que las personas se desplacen hacia esos puntos de encuentro que son, desgraciadamente, la hostelería».

Los datos de fallecidos y de hospitalizados en la comunidad autónoma son preocupantes, lo que llevará al Gobierno andaluz a tomar medidas más restrictivas, sobre todo, en el ámbito de la movilidad. No obstante, Moreno señaló que por ahora no se va a solicitar el confinamiento domiciliario de la población, apuntando que sería el «último de los recursos» porque ese escenario «provoca gravísimas consecuencias en los ámbitos económico y social».

El presidente consideró que para que se pueda aplicar un confinamiento domiciliario tiene que producirse un cambio en el decreto del estado de alarma del Gobierno central, porque, según insistió, las comunidades no tienen capacidad para decidirlo. Moreno expresó que «ojalá» no haya que llegar a este extremo, pero si hubiera que hacerlo, «tenemos que estar preparados y no se puede llegar tarde, sobre todo, porque se acerca la campaña de Navidad». «Si hay que tomar decisiones, que se tomen ahora y se prepare el terreno para el futuro», indicó, además de pedir al Gobierno central que examine cuál es el marco normativo apropiado para que las comunidades, o en su defecto el Estado, puedan tomar la decisión sobre un confinamiento domiciliario.

En la misma línea, en declaraciones en Puerto Real (Cádiz), durante una visita al Hospital Universitario, donde se están ejecutando obras de reforma para mejorar la atención sanitaria como consecuencia de la pandemia, el presidente recomendó al Gobierno de Sánchez que «se vaya preparando» y le pidió que «no perdamos ni un minuto» porque, aunque espera no tener que llegar al confinamiento domiciliario, «si las medidas no funcionan y la situación se nos va de las manos, esa opción tenemos que tener la posibilidad de aplicarla».

Por su parte, el vicepresidente de la Junta, Juan Marín, consideró que las posibles nuevas medidas para frenar los contagios se adoptarán de forma «unitaria» para el «conjunto» de la comunidad. Tal y como señaló, «hoy en muchas provincias el contagio es comunitario y no hay decisiones que hoy se puedan tomar en la provincia de Granada y que no afecten después a la de Almería, dados los desplazamientos de universitarios o de trabajadores que hay entre una hoy y otra», aseguró.

«Entiendo, aunque no lo sé con certeza, que las decisiones sean para todo el conjunto de la comunidad», dijo el vicepresidente, quien dijo que en la reunión del domingo, en función de la evolución de la pandemia y de la situación sanitaria, se podrían adoptar medidas que afecten a la reducción de horarios, a la limitación de aforos o a la suspensión de algunas actividades que no sean esenciales.

Marín remarcó que entiende la incertidumbre y la desconfianza que existe en la sociedad sobre las posibles medidas, pero quiso dejar claro en todo momento que la Junta «es seria y coherente a la hora de tomar decisiones contando con los expertos».