El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, en el Palacio de San Telmo

Moreno apela al diálogo tras el rechazo a las cuentas contra la «coronacrisis»

PSOE-A, Adelante y Vox presentan enmiendas a la totalidad al proyecto presupuestario de 2021. El partido de Abascal pone condiciones y pide que no se mantengan contactos con ningún otro partido

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, hizo un llamamiento al «diálogo» y a la «responsabilidad» a los partidos de la oposición, tras presentar enmiendas a la totalidad al proyecto de presupuestos autonómicos de 2021. «Decir no a unas cuentas extraordinarias para luchar contra la coronacrisis, que son récord en sanidad y apoyan a los autónomos, no es razonable», aseguró Moreno en su cuenta de Twitter, además de subrayar que «vivimos una situación excepcional».

Tanto el PSOE-A como Adelante Andalucía ya habían anunciado que rechazarían el presupuesto elaborado por la coalición de PP y Ciudadanos, quedando la duda de si Vox iba a seguir la misma línea. Y así fue. Al filo del plazo establecido, la formación de Santiago Abascal presentó su enmienda a la totalidad, tal y como hizo con las cuentas de 2019. Las duras palabras del presidente nacional del PP, Pablo Casado, contra el líder de Vox en la frustrada moción de censura han agrietado las relaciones entre el Gobierno andaluz y Vox, socio externo necesario para sacar adelante las cuentas públicas.

El portavoz parlamentario de Vox, Alejandro Hernández, advirtió de que su grupo no firmará ningún acuerdo presupuestario con el Gobierno andaluz mientras se mantengan negociaciones con otras formaciones políticas. Hernández detalló que desde antes del verano estuvieron trabajando con la Consejería de Hacienda sobre las cuentas del próximo año y que «por razones extrañas, y quizás ajenas a la propia Junta, desde septiembre se metió en un mismo saco a los tres partidos extra gubernamentales». «Desde el Gobierno andaluz se han estado haciendo continuos llamamientos a la izquierda, solicitando sus aportaciones con más interés e incluso con más delicadeza que la dedicada a Vox», señaló.

Especialmente crítico se mostró el Ejecutivo andaluz con la actitud del PSOE tras los innumerables ofrecimientos al diálogo. El vicepresidente de la Junta, Juan Marín, lamentó que «es imposible hablar» con el PSOE sobre los presupuestos «porque se niega a dialogar, no quiere, y con esa actitud es muy difícil llegar a algún tipo de acuerdo». Así, pidió a la líder de los socialistas andaluces, Susana Díaz, que «reflexione un poquito, que intente arrimar el hombro de verdad, no engañe más y cuando diga algo, al menos que lo cumpla».

Marín recordó que «son más de 11.000 millones para la sanidad pública, más de 8.600 para la educación, el 56% del presupuesto están destinados a igualdad, sanidad y educación y además se ponen en circulación cerca de 4.000 millones en inversiones, además de ayudas para los sectores más afectados».

Los socialistas basan su rechazo en que las cuentas «no cumplen con el blindaje de los servicios públicos en unos momentos tan delicados, con una pandemia desconocida para todos». Según el portavoz parlamentario del PSOE, José Fiscal, los presupuestos «no están a la altura de la responsabilidad que tiene un gobierno de una comunidad autónoma» como la andaluza, «la más poblada de España» y, «probablemente, en la coyuntura más complicada de los últimos 30-40 años».

Fiscal puntualizó que son «conscientes» de que es «momento de diálogo y acuerdo» y de que los de 2021 son los presupuestos andaluces «más importantes de los últimos tiempos por los retos enormes que plantea la crisis sanitaria y sus consecuencias económicas», pero el proyecto de cuentas públicas que ha presentado el Ejecutivo andaluz «no da respuesta a las necesidades» actuales.

Sobre los encuentros mantenidos con el departamento de Juan Bravo, Fiscal señaló que «han intentado marear durante todo este tiempo» a los socialistas y que «realmente no ha habido ninguna negociación». «Moreno sólo tiene ojos y oídos para la extrema derecha», criticó. Por su parte, el grupo parlamentario de Adelante Andalucía justificó su rechazo en que las cuentas son «insuficientes» y el «lastre de la política fiscal frena cualquier avance» para posicionarlas «a la altura del momento».