Salud

Los expertos alertan de que los problemas de insomnio se han multiplicado durante la pandemia

El estrés que produce el miedo a lo desconocido o a las consecuencias de esta enfermedad es una de las causas

Jefe de neurología del Hospital Quironsalud Huelva, Antonio Parralo
Jefe de neurología del Hospital Quironsalud Huelva, Antonio ParraloLa Razón

Según el jefe de neurología del Hospital Quironsalud Huelva Antonio Parralo, los problemas de insomnio se han multiplicado durante la pandemia. Es un tema preocupante y que de todos es sabido que la salud está íntimamente relacionada con la calidad del sueño o, dicho de otra forma, dormir mal tiene como consecuencia una peor salud y menor esperanza de vida. Asimismo, el doctor apunta que hay otras patologías como la hipertensión, el colesterol, la diabetes o trastornos mentales, que también se relacionan con una mala higiene de sueño.

El insomnio se define como la dificultad para conciliar o mantener el sueño, así como despertar muy temprano y no ser capaz de volver a quedarse dormido, considerándose crónico cuando ocurre al menos tres veces por semana.

Según datos de SEN (Sociedad Española de Neurología) el 80 % de los sanitarios españoles sufrieron insomnio durante los meses de marzo, abril y mayo de 2020 y un 90 por ciento aseguraba haber padecido alguna afectación del sueño durante ese periodo.

La Covid-19 es una enfermedad nueva, con afectación universal, nadie está a salvo, comenta Parralo. “El miedo a lo desconocido es irremediable, te llegan noticias de personas cada vez más cercanas que gozaban de buena salud y ahora están en la UCI debatiéndose entre la vida y la muerte. Lo mismo ocurre con el trabajo, te enteras de amigos que se quedan en paro o el bar de al lado de casa que abre muy pocas horas y no le llega para vivir. Mañana puedes ser tú o tus hijos, los que podáis veros en estas situaciones. Todos esto nos genera un estrés mantenido y una ansiedad que, por la noche, nos impide conciliar el sueño” apunta el especialista.

El estrés es la principal causa de insomnio y el aumento de casos en el último año ha sido muy notorio ya que hemos pasado de repente a vivir en un estado de hiperalerta constante. Pero, no es el estrés el único culpable, alerta el doctor. En los últimos meses, el cambio en nuestra rutina ha sido enorme. Hechos cotidianos como el café de por la tarde con los amigos, las cenas en los bares, las salidas al campo o playa los fines de semana, ir al gimnasio, a la biblioteca, en definitiva, tener libertad para hacer lo que queramos, se han visto mermados drásticamente. Pero el cambio más novedoso, según Parralo, ha sido el teletrabajo, “la oficina que estaba a media hora en coche ha quedado relegada al sofá de casa y a la pantalla de un ordenador, todo esto ha supuesto un cambio absoluto en nuestra rutina diaria, afectando a nuestros horarios y, por ende, a nuestras horas de sueño. Siempre se ha supuesto que es mejor dormir más, pero en realidad se trata de encontrar la dosis de sueño ideal y una buena calidad del sueño”.

Otro factor a tener en cuenta es la constante sobreexposición a pantallas —móvil, tableta, ordenador…—. La luz azul del espectro de luz visible generada por las pantallas disminuye la producción de melatonina, una hormona que regula el ciclo de vigilia y sueño del cuerpo. Y cuando este reloj biológico queda interrumpido, puede dejar la puerta abierta al insomnio afirma el neurólogo.

Medidas a tomar

Para tener una buena higiene de sueño es importante mantener a raya el estrés y la ansiedad. Debemos tener en cuenta que si cuidamos nuestro cuerpo cuidamos nuestra salud emocional, por este motivo el doctor recomienda llevar una dieta equilibrada, evitar el consumo de alcohol o bebidas con cafeína y hacer ejercicio moderado. También es aconsejable limitar el consumo de noticias sobre la situación actual, para no incrementar el estrés, pero si con estas recomendaciones no conseguimos controlar el estrés y la ansiedad debemos consultar con un psicólogo.

Además, es fundamental retomar un horario de sueño regular —acostarse y levantarse siempre a la misma hora—, similar al que teníamos antes de la pandemia, incluso si eso significa menos horas de sueño en total, ya que una dosis demasiado baja no es buena, pero demasiado alta tampoco lo es, apostilla Parralo.

En cuanto a la sobreexposición a pantallas, el especialista aconseja evitar este tipo de dispositivos al menos una hora antes de irse a dormir y eliminar toda esa luz azul de la habitación. Este tiempo antes de dormir debe dedicarse a uno mismo para ir relajando nuestro cuerpo y preparándolo para un sueño reparador, concluye.