Sevilla y Granada vuelven a celebrar el Corpus Christi en el interior de sus catedrales

Tal y como ocurrió el año pasado, Sevilla y Granada han vivido una festividad del Corpus Christi marcada por la pandemia, sin procesiones por las calles y con celebraciones en el interior de sus catedrales, respetando las medidas sanitarias y de seguridad por el coronavirus. En el caso de Sevilla, la eucaristía ha estado presidida por el administrador apostólico, Juan José Asenjo, que en breve dejará el cargo. Asenjo se despedirá de la Archidiócesis el sábado, antes de que el próximo 12 de junio tome posesión el nuevo arzobispo, José Ángel Saiz Meneses. En Granada, la celebración ha estado marcada por la crisis política que vive el ayuntamiento, con un alcalde, Luis Salvador, en entredicho y con las negociaciones sobre su relevo abiertas.

Aunque no ha habido procesión, numerosos comercios de Sevilla han engalanado sus escaparates con motivos eucarísticos. A la misa han acudido numerosas autoridades civiles y militares, que se han integrado en la procesión por el interior de la Catedral. Asenjo ha portado el Santísimo Sacramento y ha bendecido a los fieles que se encontraban en la avenida de la Constitución desde la puerta de la Asunción.

El administrador apostólico ha asegurado que “la Archidiócesis de Sevilla es una diócesis profundamente eucarística, signo de una larga tradición”. “En los compases finales de mi servicio a Sevilla quiero proclamar, quiero dar a conocer mi alegría porque creo que ha crecido el amor, la devoción, la adoración a Jesucristo sacramentado en nuestras parroquias”, ha señalado.

En Granada, la eucaristía ha estado presidida por el arzobispo, Francisco Javier Martínez, quien ha participado en la procesión por el interior de la Catedral con el Santísimo Sacramento portado a hombros en unas pequeñas andas. Este año, como el anterior, no ha habido desfile de la Tarasca, que ha permanecido expuesta en la plaza del Carmen.