El presidente de la Junta, Juanma Moreno, instó a la vicepresidenta tercera del Gobierno y ministra para la Transición Ecológica, Teresa Ribera, a que hoy mismo contacte con él o con la consejera de Agricultura, Carmen Crespo, para «poner en marcha cuanto antes» el acuerdo «firmado» entre administraciones y que tiene, como último fin, la demolición del hotel situado en la playa de El Algarrobico, en Carboneras (Almería), dentro del Parque Natural Cabo de Gata-Níjar. «Si puede ser mañana, mañana demolemos el Algarrobico», indicó el presidente andaluz sobre su posición para actuar sobre el inmueble promovido por Azata del Sol y del que aún pende por parte del Ayuntamiento de Carboneras la tramitación para la nulidad de la licencia de obras concedida en 2003, que condiciona el derribo del edificio, según el último pronunciamiento efectuado por el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía el pasado julio. Moreno insistió en la «voluntad» de la Junta de recuperar el espacio que ocupa el hotel de una veintena de plantas y 411 habitaciones, el cual invade la zona de 100 metros de servidumbre del dominio público marítimo-terrestre, lo que lo convierte en un «atentado desde el punto de vista urbanístico» ante su relación con el parque natural. El presidente recordó que el convenio alcanzado en la comisión mixta Junta-Estado para la demolición del hotel señala que la Administración central se ocuparía del derribo mientras que la Junta «corre con todos los gastos de recuperación del paisaje natural».