Galina, la madre coraje que rescató a su hija en Ucrania para darle una mejor vida en Málaga

Al enterarse de que las tropas rusas habían entrado en suelo ucraniano, lo primero que pensó Galina es que tenía que sacar a su hija de Ucrania. Sin dudarlo, viajó desde Málaga, donde reside desde hace un año, a su país natal con la intención de rescatar a su hija y comenzar juntas una vida en España alejadas del horror de la guerra. Cuenta que en la frontera polaca encontró numerosas carreteras cortadas y controles militares, pero lo que más le impresionó fue la cantidad de paisanos que buscaban una huida a cualquier sitio. Allí, Galina conoció a otro malagueño, Vicente Jiménez Ifergan, un coleccionista de arte fenicio con un vínculo muy estrecho con Ucrania, ya que se hijo es nació allí. Al estallar el conflicto, Vicente sintió el impulso de ayudar y fletó un autobús para sacar de Ucrania a cuantos refugiados pudiera, un total de 47, entre ellos Galina y su hija. Todos ellos llegaron en la madrugada del lunes tras un viaje largo y duro. El vehículo salió el sábado desde Cracovia, en Polonia y, tras lograr dormir en un hostal en Francia, el camino hacia Málaga fue más llevadero.

Al aterrizar, los 47 refugiados ucranianos se dirigieron a La Noria, el centro de innovación social donde la Diputación de Málaga ha habilitado plazas, pero 22 mujeres y niños fueron recogidos por la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) y el resto por amigos y familiares.

Las llegadas particulares de ucranianos a la comunidad andaluza se suceden estos días. Hoy mismo llegó a Granada un nuevo grupo de forma particular. Se trata de seis mujeres y seis niños, familiares del sacerdote ucranianos Svyastoslav Myronyuk.

Paralelamente, la administración también ha activado recursos asistenciales para dar cobertura a estos refugiados. En este sentido, el presidente de la Junta, Juanma Moreno, anunció que se han puesto a disposición del Gobierno central 1.209 plazas en las ocho provincias andaluzas: 261 corresponden a instalaciones del Instituto de Investigación y Formación Agraria y Pesquera (Ifapa), 220 a albergues de Inturjoven, 160 a otros albergues, 126 al Hospital Universitario Doctor Sagaz (Jaén) y 120 a otras instalaciones de la Junta de Andalucía. En total, 887, a las que hay que sumar 300 plazas en una residencia de Málaga cedidas por un particular y 22 ofrecidas por la Diputación de Málaga. Moreno agregó que se siguen buscando plazas en residencias y albergues públicos y privados y en viviendas tuteladas de la Junta. No obstante, el presidente de la Junta pide una respuesta coordinada a nivel estatal. Por eso, en la Conferencia de Presidentes del próximo día 13, solicitará a Pedro Sánchez un plan de estado para la acogida de refugiados y que se habilite un fondo extraordinario en solidaridad con Ucrania.

Mientras llega, numerosas organizaciones y particulares se han movilizado de forma particular para prestar ayuda al pueblo ucraniano. En Málaga, 160 familias están dispuestas a acoger a refugiados. Otra iniciativa es la de la Asociación Guardias Civiles Solidarios, que llevará a final de mes un convoy a Ucrania con 300 toneladas de ayuda humanitaria.

Futuro del Museo Ruso

Tras la polémica por la negativa del alcalde de Málaga, Francisco de la Torre a devolver, en un inicio, la medalla Pushkin concedida por Vladimir Putin por la apertura en la ciudad del Museo Ruso, el edil ha decidido convocar un pleno para tratar toda la polémica. Mientras que el PSOE pide que se detengan las transferencias al museo y la principal socia de Gobierno, la concejala de cultura Noelia Losada, de Ciudadanos, que se pusieran en “stand by”, de La Torre se muestra reticente, aunque insiste en que el “Ayuntamiento de Málaga hará lo que dictamine el Ministerio de Asuntos Exteriores. Desde Unidas Podemos, por su parte, instan al alcalde a que lo recaudado con este museo de arte se destine a ayudar al pueblo ucraniano.