Sucesos

Dos policías y una médica salvan la vida a un hombre que se estaba atragantando con un trozo de carne en Málaga

Llegó a perder el conocimiento, se le puso la piel morada por la falta de oxígeno y precisó de más de diez minutos de reanimación cardiopulmonar

Un patrullero de la Policía Local de Málaga. POLICÍA LOCAL
Un patrullero de la Policía Local de Málaga. POLICÍA LOCALPOLICÍA LOCALPOLICÍA LOCAL

La intervención de dos agentes de la Policía Local de Málaga y de una médico anestesista ha logrado evitar que un hombre sufriera consecuencias irreparables tras atragantarse con un trozo de carne que le obstruía las vías respiratorias.

Los hechos tuvieron lugar hace unos días en un restaurante ubicado en la zona de El Palo, concretamente en la avenida Salvador Allende, en el que la víctima se encontraba almorzando cuando, repentinamente, comenzó a faltarle el aire.

El hombre llegó a perder el conocimiento mientras era sujetado por varias personas, los cuales, tras sacarlo fuera del establecimiento, solicitaron ayuda a una pareja de policías locales que pasaba en ese momento por el lugar dirigiéndose a otro servicio.

Tras comprobar que el hombre no respondía a estimulo alguno y se le estaba poniendo la piel morada debido a la falta de oxígeno al no poder respirar, los agentes intervinieron de manera decidida, en primera instancia, practicándole la maniobra de Heimlich, no logrando con ello que expulsase los restos de comida, si bien si apreciaron que le subió parte de ella hasta la garganta, por lo que comenzaron a efectuarle la maniobra de reanimación cardiopulmonar (RCP) con compresiones torácicas durante más de diez minutos.

En ese intervalo de tiempo, resultó también trascendental la participación de una médico anestesista que se encontraba en el lugar, quien consiguió extraer un par de trozos grandes de carne, liberando la vía respiratoria y facilitando con ello la entrada de aire en los pulmones, siendo necesario seguir practicándole la RCP, pues el afectado no terminaba de respirar de manera autónoma.

La víctima continuó recuperando poco a poco tanto la respiración como el color natural de su piel, así como levemente la consciencia, hasta la llegada de una ambulancia del 061, cuyos facultativos le terminaron de prestar asistencia, manifestando que la labor que se había realizado había sido fundamental para mantenerlo con las constantes vitales estables, siendo finalmente trasladado a un centro hospitalario.