Turismo

La tasa turística se abre camino en las capitales andaluzas

En Sevilla, PSOE y PP se muestran partidarios de implantar un impuesto que dejaría en las arcas municipales 7 millones de euros

Unos turistas se protegen del sol con sombreros junto al muro de los Reales Alcázares de Sevilla
Unos turistas se protegen del sol con sombreros junto al muro de los Reales Alcázares de SevillaJulio MuñozAgencia EFE

La posible implantación de una tasa turística, que permita cobrar una pequeña cantidad a los turistas que pernocten en los hoteles y apartamentos, se está abriendo de nuevo camino en algunas capitales andaluzas, que podrían seguir el modelo de otras ciudades españolas y europeas con el objetivo de generar unos recursos económicos extras.

En el Ayuntamiento de Sevilla su alcalde, el socialista Antonio Muñoz, ha promovido una iniciativa que busca el acuerdo de los grupos en el próximo pleno para reclamar al Gobierno de España y a la Junta un marco normativo que permita la implantación de esta medida.

“Siempre hemos defendido la aplicación de una tasa o un instrumento de fiscalidad turística en Sevilla, pero como Ayuntamiento no tenemos competencias”, ha dicho Muñoz, que apuesta por seguir el modelo de otras grandes ciudades que no han visto reducido el número de visitantes por aplicar este impuesto.

EL PP, A FAVOR EN SEVILLA

El regidor sevillano ha indicado que su implantación, en cualquier caso “estaría sujeta a un proceso de análisis y debate con todos los agentes sociales y económicos implicados”, algo en lo que ha encontrado el respaldo del candidato del PP a la alcaldía, José Luis Sanz, “siempre que el sector esté a favor, haya consenso en la gestión y la recaudación revierta en el turismo”, ha indicado en una nota de prensa.

Su implantación, que cuenta con el apoyo también del sindicato CCOO, podría generar más de siete millones de euros al año, según fuentes municipales, que han asegurado a Efe que este instrumento sería de carácter progresivo y en ningún caso superaría los dos euros por pernoctación.

En Málaga, gobernada por el popular Francisco de la Torre con el apoyo de Cs, el Ayuntamiento ha descartado su cobro recientemente por no tener competencias para ello, pero no se cierra a explorar este impuesto en un futuro si cambia el marco normativo.

Los populares sí respaldaron exigir a la Junta que estudie un marco normativo y el pleno aprobó por unanimidad pedir a la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) que evalúe una modificación de la Ley de Haciendas Locales para incorporar la tasa como instrumento fiscal.

CONSENSO Y MARCO NORMATIVO

El concejal de Turismo de Málaga, Jacobo Florido, ha indicado a EFE que “imponerla por imponerla, no”, sino que es necesario consensuarla con el sector, mientras desde la patronal hotelera Aehcos han señalado que ningún ayuntamiento les ha consultado nada sobre este asunto.

En Córdoba, sin embargo, gobernada también por el PP, fuentes municipales han asegurado que una posible tasa “no está sobre la mesa” ni tampoco “en el horizonte más cercano”, puesto que se considera que debe concertar “un consenso político y empresarial muy grande”.

Han opinado que, una vez que parece que el sector turístico “está remontando” tras una situación “gravísima” y una “crisis sin precedentes” debida a la pandemia, imponer una tasa por pernoctación en la ciudad “ni se plantea” por parte del Ayuntamiento.

En el caso de Granada el consistorio del PSOE sí es favorable a implantar este impuesto, que debería ir en su opinión destinado a la promoción de la ciudad en los destinos internacionales, por ser estos los que aportan un mayor turismo de calidad, han indicado a EFE fuentes municipales. El Gobierno municipal entiende que la tasa contribuiría también a mejorar la oferta turística de la capital granadina para hacerla más competitiva y alcanzar la máxima calidad.

En Cádiz su alcalde, José María González “Kichi”, estudió esta posibilidad e incluso llevó al pleno la propuesta de ponerla en marcha, pero fue rechazada, por lo que no se ha planteado dar más pasos en favor de esta opción por el momento. El alcalde gaditano defendía que esta tasa revertiría en el desarrollo sostenible del turismo de la ciudad, para sostener o mejorar sus infraestructuras o actuaciones sobre el patrimonio.