Política

Moreno en el cuarto aniversario del 2-D: “El cambio se puso en marcha y sigue para una Andalucía líder”

“Nunca dejamos de confiar y de pensar que era posible”, asegura el presidente de la Junta

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno(i), observa una caja de cambios junto al director general de Renault España, José Vicente de los Mozos
El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno(i), observa una caja de cambios junto al director general de Renault España, José Vicente de los MozosRaúl CaroAgencia EFE

El presidente de la Junta de Andalucía, Juanma Moreno, ha valorado este viernes el cuarto aniversario de las elecciones autonómicas del 2 de diciembre de 2018 que conllevaron la salida del PSOE-A del Gobierno autonómico tras más de 36 años gobernando de manera ininterrumpida y la llegada del PP-A a la Junta por primera vez en la historia de la autonomía. En un comentario en su cuenta de Twitter, recogido por Europa Press, Moreno ha recordado que en aquel 2 de diciembre “nunca dejamos de confiar y de pensar que era posible, y lo hicimos realidad junto a los andaluces”. “El cambio se puso en marcha. Y sigue. No frenaremos ante la adversidad. Nuestra ambición es que Andalucía sea líder”, ha añadido cuatro años después el jefe del Ejecutivo andaluz.

El PSOE-A ganó las elecciones del 2 de diciembre de 2018, pero sólo con 33 escaños, 14 menos de los que obtuvo en los comicios de 2015, sin posibilidad de sumar con Adelante Andalucía --que obtuvo 17 parlamentarios-- para alcanzar la mayoría absoluta (55 diputados). De esta manera, la mayoría absoluta se conformó con un acuerdo de coalición de gobierno entre PP-A y Ciudadanos (Cs), con 26 y 21 escaños, respectivamente, y el apoyo parlamentario de Vox, que entró por primera vez en la Cámara autonómica con 12 parlamentarios, algo que no auguró ninguna encuesta electoral.

El Partido Socialista, con Susana Díaz como candidata a la reelección como presidenta de la Junta, logró ese 2D su peor resultado en elecciones autonómicas y se dejó 14 escaños y siete puntos de apoyo respecto a marzo de 2015, cuando logró el 35,4% de los votos. Así, contra todo pronóstico y sin que ninguna encuesta anticipase este batacazo, los socialistas se hundieron bajando de 47 a 33 escaños pese a la ser la fuerza más votada en siete de las ocho provincias, todas menos Almería, y se dejaban en el camino más de 400.000 votos con respecto a los anteriores comicios.

El PP-A de Juanma Moreno mantuvo el segundo puesto pese a perder siete de los 33 escaños que logró en las pasadas autonómicas, igualando el peor resultado del partido desde 1990, cuando obtuvo 26 parlamentarios con un apoyo del 22,2%, pero se abrió por primera vez la posibilidad de alcanzar el Gobierno andaluz si sumaba el apoyo de Ciudadanos y Vox, como finalmente ocurrió, el primero entrando en el Gobierno y el segundo con el apoyo parlamentario en virtud de un acuerdo de investidura.