Conflicto laboral

La huelga en la atención primaria fracasa y la Junta ofrece más diálogo

Ningún médico secundó el paro en Córdoba, Granada y Jaén al inicio de la jornada

Médicos, personal sanitario, pacientes e integrantes del Sindicato Médico de Primaria (SMP) y de CCOO durante la concentración convocada ante la entrada del Centro de Salud La Plata en el Barrio Amate de Sevilla
Médicos, personal sanitario, pacientes e integrantes del Sindicato Médico de Primaria (SMP) y de CCOO durante la concentración convocada ante la entrada del Centro de Salud La Plata en el Barrio Amate de SevillaJulio MuñozAgencia EFE

Fracaso de la primera jornada de huelga indefinida convocada por el Sindicato de Médicos de Atención Primaria, una central de nueva creación que no está presente en los órganos de negociación del ámbito sanitario. Los datos reflejan el escaso seguimiento de la convocatoria, tan solo un 2,5% de respaldo hasta las 12:00 horas, según el balance de la Consejería de Salud, que continúa ofreciendo diálogo a los facultativos para mejorar sus condiciones laborales.

Del total de 5.240 profesionales que se encontraban en dicho turno, 131 secundaron el paro. Cádiz fue la provincia con más adhesión, alcanzando el 6,64% y 42 profesionales, y la que menos Jaén, con el 0,36% y dos facultativos. A primera hora de la mañana los datos eran más reveladores. En Córdoba, Granada y Jaén ningún médico estaba secundando la huelga y en Sevilla solo se contabilizó uno.

Con todo, la Consejería de Salud expresó su «respeto» a la acción sindical y anunció que ya ha cerrado dos encuentros con las centrales la próxima semana para tratar los problemas de la atención primaria: una mesa sectorial el día 26 y una reunión con sociedades científicas el 31.

El sindicato convocante admitió que la huelga tuvo un seguimiento «irregular» y dudó de los datos ofrecidos por la Junta. «Nos ha sorprendido enormemente», dijo sobre la exigua cifra de seguimiento la presidenta del SMP, Carmen González, subrayando que «en algunas provincias está yendo genial, en otras más regular». González puso como ejemplo un centro de Málaga, con veinte médicos y donde «solo tres están trabajando». «Nosotros sensatos somos. Somos conscientes de que lo que pedimos requiere inversión y medidas organizativas. Estamos dispuestos a negociar, a moratorias», aseguró la representante sindical, quien insistió en los motivos de la huelga: «Estamos sobrepasados, ya lo estábamos antes de pandemia, se ha incrementado enormemente la cantidad de trabajo». González reclamó aumentar la plantilla de médicos en los centros de salud y mejorar tanto el salario como el tiempo que dedican a cada paciente.

Por su parte, el presidente de la Junta, Juanma Moreno, pidió a los convocantes «sensatez y sentido común» para abordar peticiones «realistas». «Les pido que sean conscientes del momento que estamos viviendo», dijo Moreno en la inauguración del primer «Gammaknife» de la sanidad pública española en el Hospital Universitario Virgen de las Nieves de Granada, donde recordó que la Junta ha cumplido todo lo negociado, como estabilizar laboralmente a 65.000 sanitarios, mejorar las guardias y los salarios e invertir en infraestructuras.

«Nunca antes hubo tantos profesionales sanitarios en el sistema publico, nunca antes hubo tanta inversión», recalcó el presidente, además de señalar que la inversión en sanidad roza el 7,5 % del PIB por el «enorme esfuerzo» que está llevando a cabo la Administración autonómica.

Moreno aseguró que la Junta negociará «hasta la extenuación, porque es marca de la casa», pero adelantó que se abordarán los posibles acuerdos desde el realismo y con los pies en la tierra porque «no tenemos fábricas de hacer dinero».

Reclamó además al Sindicato Médico de Primaria que tenga en cuenta que enero y febrero son meses «muy complicados» por los procesos de infecciones respiratorias como resfriados, gripe o covid, lo que convierte a los pacientes en los grandes perjudicados de la huelga. «Los sanitarios son muy sensatos», dijo Moreno, quien confió en alcanzar acuerdos que permitan desconvocar la huelga.