Tribunales
El abuelo del niño asesinado en Almería se persona en el caso y pide incinerar el cuerpo
La madre del niño aún conserva la patria potestad al no haberse dictado todavía medidas civiles cautelares que la suspendan

El abuelo materno de Lucas, el niño de cuatro años asesinado en Garrucha (Almería), se ha personado este martes como acusación particular en la causa y ha solicitado al juzgado el inicio de un expediente de jurisdicción voluntaria para poder incinerar el cadáver del menor, ante la imposibilidad de obtener la autorización de la madre, que permanece en prisión provisional. El abogado de la acusación particular, José Luis Martínez, ha explicado a EFE que, a pesar de la gravedad de los delitos imputados —asesinato y maltrato habitual—, la madre del niño aún conserva la patria potestad al no haberse dictado todavía medidas civiles cautelares que la suspendan.
Esta circunstancia legal hace imprescindible su firma para autorizar el sepelio o la incineración, un trámite que se encuentra bloqueado desde el centro penitenciario. "El abuelo quiere incinerar a su nieto para que descanse y poder llevarse las cenizas, pero nos encontramos con un problema burocrático que puede derivar en una guerra legal", ha señalado el letrado.
Ante la falta de respuesta o la negativa de la detenida a facilitar el proceso desde prisión, la representación letrada del abuelo ha instado al juez a que supla la voluntad de la madre mediante un procedimiento de jurisdicción voluntaria, evitando así que el cuerpo permanezca indefinidamente en el Instituto de Medicina Legal.
La personación del abuelo como acusación particular se ha formalizado inicialmente en el Juzgado de Instrucción número 4 de Vera (Almería), que se encontraba en funciones de guardia cuando se produjo el hallazgo del cuerpo y las detenciones.
No obstante, el abogado de la familia prevé que la causa sea inhibida en breve al Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1 de la localidad, competente en materia de Violencia sobre la Mujer, dado que uno de los investigados es la pareja sentimental de la madre y existía una orden de alejamiento previa. La acusación ha querido aclarar la confusión generada en torno a la filiación del menor. El letrado ha subrayado que el padre biológico "nunca reconoció al niño" y no forma parte del procedimiento. Legal y afectivamente, la figura paterna ha sido siempre el abuelo materno, Martín, quien dio sus apellidos al pequeño Lucas y quien ahora lidera la búsqueda de justicia.
"La familia quiere que se investigue a fondo y se llegue a la verdad. Si la hija ha tenido participación y es culpable, que lo pague igual que cualquier otro. El abuelo quiere justicia para su nieto por encima de todo", ha aseverado Martín. Además del conflicto inmediato sobre el destino de los restos mortales de Lucas, se avecina otra batalla legal por la custodia del futuro bebé que espera la detenida, quien se encuentra embarazada de cinco meses. La acusación particular ha confirmado que el abuelo solicitará formalmente hacerse cargo del recién nacido en cuanto se produzca el alumbramiento, para evitar que el bebé quede bajo la tutela de la madre o entre en el sistema de protección de menores, garantizando que permanezca en el entorno familiar del abuelo.