Tribunales
Brett Dryden: de muerte accidental a expirar durante un robo sin autores en Almería
Los hechos se remontan a la noche del 21 de julio de 2024, cuando el propietario de un club de cannabis de Mojácar fue encontrado muerto por "hemorragia pulmonar"
El cadáver del británico Brett Dryden, de 35 años, fue encontrado en su domicilio de Mojácar (Almería) el 21 de julio de 2024, un hallazgo que dio pie a una causa que comenzó como una posible muerte accidental hasta que la investigación demostró que expiró durante un robo sin autores conocidos.
Una incógnita que ha llevado a que el Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Vera (Almería) acuerde el sobreseimiento provisional y archivo de la investigación, pese a los indicios de un robo con violencia, "al no constar persona identificada en la causa" a la que imputar el robo… y un posible homicidio.
Los hechos se remontan a la noche del 21 de julio de 2024, cuando el cuerpo de Dryden, propietario de un club de cannabis en la localidad , fue encontrado por un amigo en su vivienda. La autopsia determinó que la causa de la muerte fue una "hemorragia pulmonar".
La inspección inicial de la vivienda no mostró signos de lucha, se descartó inicialmente un robo al hallar las pertenencias del fallecido y se pensó en una muerte accidental. Sin embargo, la investigación ampliada del Equipo de Homicidios de la Guardia Civil cambió de rumbo.
Las testificales revelaron que la víctima había salido de su club a las 13:35 horas diciendo "ahora vuelvo" tras guardar un "fajo de billetes" en una cartera. Su madre, Sandra Dryden, cifró en unos 8.000 euros el dinero que su hijo podría tener.
Además, un amigo testificó que Brett le llamó a las 14:00 horas, mencionando que esperaba a unas personas para un trato de marihuana, y colgó abruptamente diciendo "ya han llegado".
El giro clave provino de una cámara de seguridad vecina, que grababa el único acceso a la vivienda. Las imágenes mostraron a las 13:59 horas a una persona con gorra y mascarilla vigilando el acceso. A las 14:15 horas, dicha persona subió a la casa. Finalmente, a las 14:16 horas, el mismo individuo y un segundo, también con rostro y cabeza cubiertos, huyeron corriendo del domicilio.
Uno portaba una bolsa grande y el otro una "bolsa pequeña similar al bolso de Brett".
Se concluyó que Brett fue víctima de un robo violento. Los autores sustrajeron su iPhone 15 Pro, las llaves de su vehículo y la cartera con el dinero.
La pista principal fue el teléfono robado. El terminal de Brett dejó de dar señal en Mojácar a las 14:15 horas, coincidiendo con la huida. Gracias a un servicio de geolocalización el dispositivo fue localizado días después en un domicilio de Vera.
La Guardia Civil investigó la finca, averiguando que allí residía, entre otros, un hombre con nueve detenciones previas por delitos contra el patrimonio y contra las personas.
El análisis de los repetidores telefónicos reveló el indicio más sólido: un teléfono estuvo conectado en la escena del crimen en Mojácar entre las 13:19 horas y las 14:19 horas. Su última conexión fue tres minutos después de la huida de los sospechosos.
Ese mismo día, a las 16:36 horas, ese mismo teléfono comenzó a conectarse en el repetidor que da cobertura a la finca de Vera, permaneciendo allí hasta la noche.
Sin embargo, esta línea de investigación llegó a un punto muerto. El teléfono estaba registrado a nombre de una mujer sin antecedentes, pero los agentes concluyeron que ella no era la usuaria real.
Según el auto de archivo, la Guardia Civil "no ha podido identificar al usuario real para continuar la línea de investigación", sobreseyendo la causa al no poder imputar a nadie el delito. Un sobreseimiento que Sandra, la madre de Brett, piensa recurrir hasta el final.
Para Sandra, son muchas las incógnitas que rodean la muerte su hijo y cree que podrían despejarse si continúa la investigación.