28-M

PP andaluz: el viaje del «ostracismo social» al éxito

Moreno pide a sus alcaldes y concejales electos «humildad» y critica el adelanto electoral, una «huida hacia adelante» de Sánchez «acorralado por las críticas internas»

El presidente de la Junta y el secretario general del PP-A, junto a los alcaldes y candidatos populares en las ocho capitales andaluzas
El presidente de la Junta y el secretario general del PP-A, junto a los alcaldes y candidatos populares en las ocho capitales andaluzasEPEP

«Tenía pensado cogerme una semanita, pero imposible». El giro inesperado de Pedro Sánchez, convocando elecciones generales para el 23 de julio, no aguó la fiesta de los populares andaluces. La formación celebró una junta directiva regional en la que analizó el resultado «histórico» cosechado el pasado domingo. El PP se proclamó vencedor de las elecciones municipales en Andalucía, consiguiendo mayorías absolutas en cinco capitales y con opciones reales de gobernar las ocho junto a seis diputaciones provinciales. Un motivo más que justificado para que la delegación almeriense, por ejemplo, se pusiera en camino a las 5:00 de la mañana hasta Sevilla, donde se reunieron alcaldes electos, cargos orgánicos del partido, diputados autonómicos y nacionales y ex presidentes de la formación, como Javier Arenas, Teófila Martínez y Juan Ignacio Zoido.

El presidente de la Junta, Juanma Moreno, instó a «terminar el ciclo electoral», tras la mayoría absoluta conseguida el 19-J y los buenos resultados del domingo, remando en la misma dirección para hacer presidente del Gobierno a Alberto Núñez Feijóo. Moreno, no obstante, pidió a los suyos humildad a la hora de gestionar este éxito electoral, puesto que «hemos sufrido el ostracismo social». De hecho, al partido le costaba trabajo completar candidaturas en los pueblos del interior, además de sufrir reiterados varapalos electorales durante los casi 40 años de hegemonía socialista en la comunidad. La dinámica ha cambiado, un hecho que se visualiza, por ejemplo, en la localidad sevillana de Utrera, donde el PP no tenía representación municipal y el domingo fue la fuerza más votada. «Venimos de abajo, de las barriadas», aseguró el presidente andaluz. «Somos servidores públicos sensibles al dolor».

Ayer arrancó el juicio por los pagos en clubes de alterne con tarjetas de la Faffe, uno de los escándalos que salpicaron a los gobiernos socialistas. En este sentido, Moreno pidió «ejemplaridad» a los concejales populares salidos de las urnas y que no «defrauden» la confianza depositada en ellos. «Hay que decir la verdad, lo que se puede hacer y lo que no». Especialmente crítico se mostró con el presidente del Gobierno, remarcando que en España está en marcha un «cambio de ciclo político». «Los ciudadanos no quieren un Gobierno que se ha instalado en la soberbia, distante y que pacta con los independentistas», además de «mentir de forma reiterada».

Sobre el adelanto electoral, Moreno señaló que Sánchez ha tomado esta decisión «acorralado por las críticas internas y por la opinión pública». A su juicio, se trata de una «huida hacia adelante», una opción con la que «busca salvarse él». «Faltan 55 días para que los ciudadanos elijan otra forma de entender la sociedad, así que Alberto será el próximo presidente del Gobierno de España», aseguró.

La junta directiva regional tuvo mucho de puesta en escena, con los candidatos de las ocho capitales detrás de Moreno en una exhibición de poder municipal. De Bruno García, que ganó con mayoría absoluta, dijo que partió de una posición complicada y valoró las amplias victorias de Málaga, Córdoba y Granada. Sevilla era «uno de los grandes objetivos del sanchismo» que ahora ha girado hacia el PP y destacó el «vuelco» conseguido en Huelva y las opciones para gobernar Jaén.

Espadas, un liderazgo cuestionado

Segundo batacazo electoral del secretario general del PSOE-A, Juan Espadas. A los malos resultados del pasado 19 de junio se suma ahora la pérdida de las capitales andaluzas y algunas ciudades importantes como Jerez. Su liderazgo es cuestionado internamente, aunque se empeñó en defender que tiene el apoyo de los ocho secretarios provinciales. A su juicio, el PSOE obtuvo un mal resultado el domingo, aunque esto no ha supuesto una «catástrofe», y criticó la «campaña de intoxicación orquestada desde la derecha». «Ha habido una estrategia de confrontación y de ‘antisanchismo’ muy agresiva; se han escuchado barbaridades», lamentó.