Agricultura

Bruselas se abre a estudiar la prolongación de ayudas excepcionales por la sequía

Carmen Crespo traslada a la CE que la situación en Andalucía se asemeja a la vivida en el campo con el Covid o la guerra de Ucrania

Carmen Crespo y miembros de la Consejería de Agricultura, reunidos con el equipo del comisario Janusz Wojciechowski
Carmen Crespo y miembros de la Consejería de Agricultura, reunidos con el equipo del comisario Janusz WojciechowskiLa Razón

Andalucía, la región agraria más importante de Europa, fue escuchada ayer Bruselas. La consejera Carmen Crespo trasladó al equipo del comisario europeo de Agricultura y Desarrollo Rural, Janusz Wojciechowski, la realidad de un campo andaluz marcado en la actualidad por la sequía severa que soporta la comunidad, algo que terminará afectando, si no llueve lo necesario, a las producciones de la despensa del Viejo Continente. De ahí la importancia de un encuentro del que la Junta extrae como conclusión receptividad a que Andalucía pueda prolongar ayudas especiales a sus agricultores a través de la llamada «Medida 22», que no es otra cosa que permitir a la administración autonómica destinar una partida de fondos del Programa de Desarrollo Rural (PDR) a subvenciones «excepcionales», como ya sucediera con el Covid y con los efectos de la invasión de Ucrania.

A través de estas ayudas de concurrencia no competitiva, la Consejería ya ha repartido a final de 2022 alrededor de 80 millones de euros a sectores como la ganadería, la flor cortada, los cítricos, el equino de cría, el vitícola, entre otros. En esta ocasión, si Europa da luz verde, Crespo entiende que el gran beneficiario sería el olivar. «La Medida 22 permite dar una mayor liquidez a nuestros agricultores en un momento tan dificultoso de elevados costes de producción y sequía, crucial para el olivar, que presenta pérdidas de producción del 60% y costes de producción que han subido por encima del 115%», señaló en una nota de prensa remitida a los medios, sin renunciar a articular una fórmula similar pero con idéntico resultado para miles de agricultores que lo están pasando mal.

La consejera, que hoy continúa con su agenda en Bruselas, valoró también que la Comisaría de Agricultura esté planteándose ampliar los recursos económicos y los propios criterios de la Reserva de Crisis al ser conscientes de que «se ha quedado corta» y debe ahora abrirse a tener en cuenta las diferentes afectaciones que tienen que ver con los efectos del cambio climático, entre ellos, «la sequía que sufre muy especialmente Andalucía»

Uno de cada tres perceptores de la Política Agraria Común (PAC) en España es andaluz, dependiendo directamente de sus ayudas un total de 250.000 productores.

Entre las peticiones realizadas al comisario europeo destacan también la necesidad de extender la flexibilización que se adoptó para percibir la PAC con motivo del conflicto bélico en Ucrania, ampliando la posibilidad de poner en cultivo las tierras en barbecho también en 2024 sin que suponga pérdida de ayudas de la PAC. Y, por supuesto, la activación de cláusulas espejo en los acuerdos comerciales con terceros países para evitar mayores exigencias, por ejemplo, en materia fitosanitaria, a los productores locales y, por ende, situaciones que suponen «una clara competencia desleal».