Sucesos

La adaptación del narco al medio: menos tráfico de droga y más robos con violencia

El Plan Especial provoca la caída de hasta un 60% del narcotráfico en el Campo de Gibraltar al tiempo que se incrementan otros tipos delictivos y se produce un efecto dominó a otras provincias

Traslado a los juzgados de Barbate de uno de los ocho detenidos por la muerte de dos guardias civiles
Traslado a los juzgados de Barbate de uno de los ocho detenidos por la muerte de dos guardias civilesAgencia EFE

En la mitología griega, la Hidra de Lerna era un monstruo acuático ctónico con forma de serpiente policéfala y cuyo número de cabezas va desde tres, cinco, siete o nueve hasta cien, e incluso diez mil, según la fuente. Hércules, el héroe que según la mitología separó las columnas del Estrecho de Gibraltar (por lo que aparece en el escudo andaluz y de Cádiz) mató al monstruo de aliento venenoso en el segundo de sus doce trabajo. La actual hidra de la comarca gaditana es el narcotráfico y el crimen organizado, con tantas ramificaciones como cabezas tenía el monstruo mitológico. La Mancomunidad del Campo de Gibraltar está formada por 8 municipios, siendo el más grande Algeciras, e incluyendo a La Línea de la Concepción, San Roque, Los Barrios, Tarifa, Jimena de la Frontera, Castellar de la Frontera y San Martín del Tesorillo. Las estadísticas de criminalidad de todos ellos, en líneas generales, muestran un descenso del narcotráfico –que se ha derivado a otras provincias en un efecto dominó– con la implantación del Plan Especial en la zona y un aumento de otros delitos como los robos en establecimientos y vehículos. Los tipos delictivos y las tasas de paro, además de la belleza de un paisaje extremo, son los puntos comunes de la mayor parte de estas localidades. Cuando arrancó el Plan Especial antidroga en la zona –cuyo balance en cinco años y medio es de casi 1.700 toneladas de droga intervenidas, 22.207 operaciones y 19.907 detenidos e investigados– el alcalde de uno de estos municipios del Campo de Gibraltar llamó al delegado del Gobierno para señalarle que la presión policial estaba provocando no sólo un parón del narcotráfico sino de toda la actividad económica en vista de que «todo se paga en efectivo». El mismo día que el ministro Marlaska hacía balance del Plan Especial dos guardias civiles eran asesinados embestidos por una narcolancha. Marlaska destacó el aumento de medios, presentó nuevos coches y habló de una zona especial de facto, mientras todas las embarcaciones de la demarcación de Cádiz estaban averiadas. La realidad se manifestó en forma de posible homicidio.

El punto de mira se ha puesto de nuevo en Barbate, que está en la Comarca de La Janda, como pasara a partir de los años 90, de donde procede el latiguillo de «atún y chocolate». La población de Barbate desde los años 70 se mantiene por encima de los 20.000 habitantes. En los años 60 tenía algo más de 18.000. La tasa de paro también mantiene una tendencia estable. En 2006, estaba en el desempleo el 36,45% de la población. En 2007, con el crack del ladrillo, casi la mitad de los barbateños se encontraba oficialmente en paro: el 48%. En 2012, a la salida de la crisis inmobiliaria, más del 55%. Desde entonces la tendencia ha sido descendente, hasta el 41% de 2021 y casi el 28% de final de 2023. En la misma comarca de Gibraltar, lidera la tasa de paro La Línea con casi un 34% de desempleados. Entre los municipios de su rango de población, sólo Arcos superaba a Barbate al término del año pasado en desempleo. Doce municipios de Cádiz están entre los veinte con más paro de España, con cuatro a la cabeza en porcentaje total.

Según los datos de la Agencia Tributaria, Barbate ocupaba el puesto 24 por renta municipal, con 18.659 euros. La provincia de Cádiz es la quinta más pobre (10.712 euros anuales de media por habitante), por detrás de Almería (10.103), Badajoz, Huelva y Jaén. Según los datos del Atlas de distribución de renta de los hogares de 2021, la renta barbateña está en algo más de 10.000 euros, por los cerca de 14.000 de Los Barrios o los algo menos de 11.500 de La Línea.

En la zona se vive de la pesca, cuya rentabilidad mengua, y del turismo, de difícil explotación al estar en un entorno natural protegido. La provincia gaditana es la que más toneladas extrae y vende, la que mayor valor económico genera y la que moviliza un mayor número de puestos de trabajo en la pesca, dando empleo directo en 15 municipios de la provincia, destacando Barbate, Sanlúcar de Barrameda, Conil, Tarifa y Chipiona. El sector pesquero ha pedido auxilio por el parón del acuerdo de pesca con Marruecos y el alga asiática.

Estadísticamente, «las incautaciones de hachís han disminuido pero han subido las de cocaína. Antes eran narcotraficantes de la zona y ahora se está viniendo bandas especializadas desde fuera», informó el secretario regional del Sindicato Unificado de la Policía (SUP) Ángel Becerra. «Los policías se ven acosados por los narcos en destino», señaló. Los planes antidroga están provocando que la actividad se este incrementando «en otras provincias como Almería, Málaga o Huelva», por lo que «son necesarios refuerzos en costas y en el río, porque también están metiendo droga» por vía fluvial.

Un análisis de las estadísticas de criminalidad en la zona del Campo de Gibraltar y La Janda muestra una notable bajada del tráfico de drogas que se «equilibra» con el aumento de otros tipos delictivos. La presión policial está provocando un efecto dominó con la expansión del narco a otras zonas –lo que llevó también a extender el Plan Especial a prácticamente todas las provincias andaluzas– y que los delincuentes que trabajan con los narcos compensen sus pérdidas con las ganancias de otros delitos.

Así, en Algeciras, el municipio más grande y próspero de la zona, la criminalidad convencional subió un 1,6% y el total de infracciones un 3,6%. El tráfico de drogas cayó un 17,5% mientras que los robos con violencia e intimidación subieron casi un 20%; los hurtos, un 6%; y los robos de vehículos, un 6,3%. En Barbate, el municipio de nuevo bajo lupa, la criminalidad cayó casi un 5% y las infracciones penales, cerca de un 3%. Mientras el tráfico de drogas descendió un 33,3%, los robos con fuerza en domicilios, establecimientos y otras instalaciones se elevaron un 112,5%; los robos con fuerza en domicilios, casi un 110%; y las sustracciones de vehículos un 300%.

En Los Barrios, la criminalidad aumentó un 2% y las infracciones penales, cerca de un 5%. Los delitos de drogas cayeron un 60% y sólo subieron los hurtos un 1,5% mientras que el resto de tipos de robo bajó considerablemente.

En San Roque, la criminalidad subió un 1,1% y el total de infracciones penales, un 7,1%. El tráfico de drogas subió un 33,3%. Los robos en domicilios bajaron en torno a un 20%, porcentaje similar a lo que subió en la modalidad de con intimidación y con fuerza.

Tampoco parece casual que las prisiones de Cádiz sean año tras años las más conflictivas del país, con especial incidencia en Puerto III. De las agresiones, según el informe de Interior al que accedió LA RAZÓN, Instituciones Penitenciarias reseña que «el 51,9% son de carácter leve, el 46% sin lesiones y el 1,9% de carácter grave». En concreto, en los penales de Cádiz, Algeciras presenta dos casos leves y dos sin lesiones; Puerto I, seis leves y seis sin lesiones; y Puerto II se eleva a 16 leves y 11 sin daños. Junto a la prisión de Zuera, la cárcel de Puerto III se encuentra empatada en el primer lugar con un total de 27 agresiones. El centro portuense vuelve, por segundo año consecutivo a situarse entre las tres prisiones con mayor probabilidad de agresión a los funcionarios de prisiones, informó el sindicato Tu Abandono Me Puede Matar.

El año 2024 arrancó con la «Operación Ranger» de la Guardia Civil y la desarticulación de la organización criminal dedicada al narcotráfico y al tráfico de inmigrantes que dirigía y controlaba desde el Campo de Gibraltar (Cádiz) Bubu, considerado el criminal más activo del sur de España. En abril de 2023 cayó el «Piolín», gran jefe del crimen organizado entre Ceuta y Andalucía con 82 detenidos de su clan y el de Los Tayenas, las dos bandas que luchan por el control del narcotráfico. Recientemente se informó de la desarticulación de una red criminal dedicada a dar vuelcos a otros narcos en el Campo de Gibraltar y, por otro lado, la condena a Antonio Tejón, líder de «los Castaña», a seis años de prisión, quien desde prisión coordinaba una red con una «incesante» actividad para introducir alijos de hachís desde Marruecos. El crimen organizado, con el sur de Cádiz y la Costa del Sol (donde se resguardaba por ejemplo el «Piolín») son escenarios recurrentes de la crónica negra, dejando cifras como los 45 homicidios dolosos y asesinatos en grado tentativa de Málaga que recoge la última estadística de Interior (de enero a septiembre de 2023) o los 40 de la provincia gaditana. Las consecuencias de los ajustes de cuentas. También de los amarres, un secuestro entre bandas criminales como venganza. Los raptos se dispararon el pasado año en Andalucía, de 12 a 29, un 141,7%.

Al tradicional problema del narcotráfico se une que las estructuras de la droga se están empleando también para la trata de seres humanos, con ramificaciones en la prostitución. La región andaluza es la más afectada de España por la trata, con más de 300 víctimas anuales y más de un millar de personas atendidas en un ejercicio. Del drama de la trata de personas derivan también imágenes como la reciente de final de año de los cuerpos muertos en el Estrecho tras ser arrojados al mar.