Con el agua al cuello en las pedanías costeras de Cádiz

Era cuestión de tiempo que, de un modo u otro, las pedanías costeras de la comarca de La Janda (El Palmar, Zahora, Los Caños de Meca...) se vieran en una situación de bloqueo en torno a los servicios básicos.

Desde hace décadas, estas zonas de extraordinaria afluencia turística no han dejado de crecer en edificaciones (algunas ilegales) y negocios, pero no en servicios tan esenciales como el abastecimiento de agua; ‘suministro natural’ que se ha visto mermado en los últimos años por la pertinaz sequía que sufre la provincia y la consiguiente fatiga de los acuíferos.

Esta situación que no ha dejado de ser denunciada antes las administraciones públicas por colectivos como la Asociación de Vecinos de Zahora ‘Costa de la luz’ y que, como ya es habitual, muestra en los meses de verano (con un extraordinario aumento de la población) su cara más oscura. Con ser casi insostenible la situación, ésta ha sufrido un nuevo giro de tuerca con la suspensión temporal de actividad de la principal empresa de transporte de agua en camiones cisterna que abastecía a la zona. Suspensión solicitada al juez por la Dirección General de Salud Pública y Ordenación Farmacéutica a través de la Delegación Territorial de Salud y Consumo de Cádiz y que, como medida cautelar y carácter urgente, ha sido dictada para «preservar la salud pública».

Según ha sido ratificada por la autoridad judicial, «tras la investigación realizada por los agentes del Servicio de Protección a la Naturaleza (Seprona) de la Comandancia de la Guardia Civil en Cádiz en septiembre de 2022, y la elaboración del preceptivo Informe de Valoración Sanitaria, la Delegación Territorial de Salud y Consumo adoptó el pasado día 3 de marzo de 2023 esta medida temporal por la existencia de un riesgo sanitario grave con probabilidad de causar perjuicio para la salud pública y de transcendencia directa importante para la salud de los consumidores».

Se calcula que dicha empresa prestaba servicio a unas 400 personas, afectando su cese de actividad tanto a familias residentes como a negocios y viviendas de alquiler. Ante esta situación, los vecinos afectados han celebrado distintas manifestaciones frente a los ayuntamientos de los que dependen sus pedanías (Barbate y Vejer) para denunciar la situación. «Los vecinos de Zahora y Los Caños llevamos décadas reclamando al Ayuntamiento de Barbate la dotación de agua potable. Está todo documentado, desde 1999 hasta ahora. El Ayuntamiento, con gobiernos de diferente color político, siempre ha prometido que dotaría a las pedanías de este servicio básico de primera necesidad pero nunca ha cumplido».

«En 2004», continúa la Asociación de Vecinos de Zahora ‘Costa de la luz’, «se instalaron los depósitos en El Palmar y las tuberías atravesando Zahora para dotar de agua a estas pedanías, pero desde entonces han sido muy pocos los que han podido tener acceso a la red y el conjunto de estas poblaciones (Zahora, Los Caños, La Cañada del Álamo y San Ambrosio, en Barbate, y El Palmar, en Vejer) continúa a día de hoy sin este elemento esencial para vivir», señalaron.

Asimismo, los vecinos han impulsado una recogida de firmas para solicitar que la empresa de transporte de agua pueda volver a la actividad.

«La situación provocada por estos precintos es más grave y alarmante en pleno verano, porque hay miles de turistas en la zona, es necesario que se reanude este servicio, sin el cual es imposible que vivan todas estas familias y que se sostengan muchos negocios y, como medida alternativa inmediata, los ayuntamientos de manera urgente deben proveer de agua a estos vecinos y negocios», señala el burofax con las firmas (160) enviado a Eva Pajares Ruiz, Delegada Territorial de Salud y Consumo en Cádiz.

En las últimas horas, el Ayuntamiento de Vejer ha señalado que va a habilitar un punto de agua en El Palmar para «dar respuesta al problema de abastecimiento de agua por parte de las empresas autorizadas».