Verano
Playas y calas de Cádiz para dar este verano ‘esquinazo’ al Levante
Es el enemigo común de quienes, cada vez más, eligen la costa gaditana para pasar sus vacaciones
Con el ‘Lorenzo’ haciendo de las suyas, las playas se convierten estos meses en el mejor de los refugios posible para, como diría un buen carnavalero, “dar esquinazo” a las altas temperaturas y disfrutar de placenteras y refrescantes jornadas de baño.
Placeres y chapuzones que están garantizados en la provincia de Cádiz, en su litoral, con nada menos que138 kilómetros de playas y 83 zonas habilitadas para el baño entre las fronterizas San Roque y Sanlúcar de Barrameda.
Escenario envidiable y soñado por gaditanos y turistas a lo largo del año que solo puede verse alterado por un fenómeno meteorológico incontrolado e imprevisible. El enemigo común de quienes, cada vez más, eligen la costa de Cádiz para pasar sus vacaciones. Su nombre, viento de Levante.
Procedente del Mediterráneo, el Levante –que ha servido de freno a desarrollos turísticos que hubiesen convertido a la costa de Cádiz en algo muy diferente a lo que es hoy día- es imposible de soportar en la gran mayoría de las playas gaditanas, castigando a los bañistas con potentes e irregulares ráfagas de viento y arena que convierten el paraíso soñado en un infierno (oasis para los amantes del windsurf, wing foil, kite surf, etc.).
Afortunadamente, para combatir esa ‘tormenta perfecta’ del verano (se suele prolongar entre 4 o 5 días), la costa cuenta con zonas en las que refugiarse o en las que, en el mejor de los casos, sufrirlo más atenuadamente. Aquí te apuntamos seis playas y calas en las que ‘regatear’ al viento de Levante
La Caleta (Cádiz)
Localizada en el casco histórico de la capital, ‘combate’ el viento de Levante al abrigo de un patrimonio histórico difícil de igualar, el Balneario de La Palma y los castillos de Santa Catalina y San Sebastián.
Conocida por su extraordinaria belleza y por ser inspiración de las coplas más ‘sentías’ del Carnaval de Cádiz, es una zona de baño muy familiar, en la que en estos meses no faltan los perfumes de las caballas ‘asás’ con picadillo.
Santa María del Mar (Cádiz)
Su condición de refugio es tal que, de hecho, debe su existencia a los espigones de Levante y Poniente, que la flanquean y blindan de ambos vientos.
A los pies del pintoresco ‘Pirulí’ y con una vistas envidiables del perfil más costero de Cádiz (la figura de la catedral resulta espectacular), se localiza algo más al interior, a continuación de la playa Victoria.
De reducidas dimensiones, es un paraíso para muchos bañistas y para los aficionados al surf.
Calas de Conil
Si le preguntas a un gaditano cómo disfrutar de la playa con viento de Levante, las calas de Conil siempre van a estar ahí. Se trata de pequeños oasis que, irregularmente, se reparten a lo largo y ancho de un perfil de acantilados de extraordinaria belleza.
Las más famosas, las calas del Aceite, de mayores dimensiones y más cercana al núcleo urbano, y la de Roche, ligada a una de las zonas residenciales costeras con más renombre de la costa de Cádiz.
A tener en cuenta, la presencia de rocas y el movimiento de las mareas, que reducen la superficie de las calas.
La Muralla (El Puerto de Santa María)
Su nombre ya evoca que es un lugar de refugio. Tanto que este procede del resto de muralla, aún existente, del que, allá por el siglo XVIII, fue el Fuerte de Santa Catalina.
Pequeña, de fina arena, cercana a Puerto Sherry y con unas envidiables vistas a la Bahía de Cádiz, es una de las playas con más encanto de cuantas se reparten por la costa gaditana. Sus atardeceres son una auténtica maravilla.
La Calita (El Puerto de Santa María)
Localizada también en orillas portuenses, en el entorno de la urbanización de Vistahermosa, se trata de un pequeña cala de arena fina en la que poder huir de los fuertes embates del viento de Levante.
Atalaya costera de la Bahía de Cádiz y del Puente de la Constitución, es de dimensiones reducidas, que merman con la subida de la marea.
Como la gran mayoría de calas de la costa gaditana, se caracteriza por su entorno rocoso.
Las Tres Piedras (Chipiona)
Se trata de una de esas playas de la costa de Cádiz que aún presenta un estado casi virgen y, por tanto, con un gran valor ambiental. Con una longitud de 2.800 metros, lo que le da carácter familiar, se antoja la zona de baño ideal para los amantes de rincones y paisajes únicos, a lo que contribuye el cordón dunar que la rodea.
Hábitat del camaleón, cuando baja la marea quedan al descubierto los conocidos corrales de pesca de Chipiona, arte de captura de peces de extraordinaria singularidad.
Punta Candor (Rota)
Al abrigo de los pinares del Parque Natural de la Almadraba, es una de las joyas de la atractiva y rica franja litoral de Rota. Como sucede en la playa de Tres Piedras, hace gala de un espectacular cordón dunar elevado, que le ofrece protección y, además, otorga un carácter más íntimo. Lugar de culto para numerosos bañistas, recibe su nombre del saliente que conforma su peculiar morfología.
✕
Accede a tu cuenta para comentar