Elecciones municipales

Redes, encuentros y «cafés» para captar el voto

Los partidos han cambiado su comunicación con los ciudadanos

Patricia Cavada
Patricia CavadaLa Razón

«Ahh, cómo hemos cambiado. Qué lejos ha quedado...», decía la primera estrofa de una de esas canciones que, allá por principios de los 90, se convirtió en himno de muchos de la mano de Presuntos Implicados y que hoy, desde la distancia, se podría aplicar a las campañas de las elecciones municipales en Cádiz y en cualquier punto de Andalucía.

Tiempos, los 80 y 90, en los que los votantes, sobre todo, se ganaban en la calle, a golpe de palabra, talante y promesas. Y en los que los mítines –entonces para convencidos y por convencer– se convertían en el auténtico y más fiable termómetro de lo que, días después, podría ocurrir en las urnas de las, entonces, 44 poblaciones de la provincia de Cádiz. Mítines que dejaron para la historia escenarios como el desaparecido Pabellón Fernando Portillo, las plazas de toros de El Puerto de Santa María y Algeciras o el Municipal de Chiclana, con tardes y noches para el recuerdo de muchos políticos y partidos de la provincia.

Eran años de alcaldables y posteriores regidores ya históricos, como Teófila Martínez (Cádiz), Antonio Patricio González García (Algeciras), José Antonio Barroso (Puerto Real) Pedro Pacheco (Jerez de la Frontera), Francisco González Cabaña (Benalup-Casas Viejas), Antonio Mateos (Grazalema), Hernán Díaz Cortés (El Puerto de Santa María) y, entre otros, Manuel Jiménez Barrios (Chiclana), quienes tenían como máxima herramienta de difusión de sus programas los actos públicos, folletos y algún que otro objeto de marketing.

Por aquel entonces, camisetas, llaveros, banderitas o mecheros –la economía no daba para mucho más– eran los objetos con los que se premiaba a los simpatizantes y con los que se intentaba dar un último «empujón» a los indecisos.

No obstante, frente al marketing se imponían esos actos multitudinarios y públicos en los que, con una escenografía al uso, se intentaba contar con los «primeros espadas» de los partidos a nivel regional –Arenas, Chaves, Felipe Alcaraz …– y nacional –González, Aznar, Anguita...– para transmitir la fortaleza y el respaldo al alcaldable en cuestión.

Nada se sabía de las redes sociales y el boca a boca era el facebook, el instagram o el tik-tok de turno, una poderosa herramienta en tiempos en los que interesaba más la política y la carga ideológica.

Y, aunque no necesariamente cualquier tiempo pasado fue mejor, mucho han cambiado los procesos electorales en la provincia y, lo más destacable, las herramientas, métodos y puestas en escena empleadas por muchos candidatos para captar la atención y, si se puede, el voto del ciudadano.

Claro ejemplo de ello –quizás el más destacado de estas elecciones– es la campaña de la alcaldesa y alcaldable de San Fernando, Patricia Cavada, con una puesta es escena al más puro estilo EE. UU.

Campaña cuyo telón levantaba con una multitudinaria presentación del programa electoral tipo coaching y a la que la candidata socialista suma su «Cavadaneta» –vehículo personalizado– para, entre café y café, sumar apoyos.

Respaldo que, con una escenografía «made in USA», también persigue estos días con 20.000 llamadas telefónicas a los vecinos por parte de ella y su equipo.

No obstante, la mayor diferencia con el pasado la marcan las redes sociales, en las que, con mayores o menores medios –no todos tienen para contar con equipos de comunicación–, los candidatos a la reelección venden sus logros y los aspirantes sus programas.

Ejemplo de ello son los populares José Ignacio Landaluce, con la generación de videos de promoción de los logros alcanzados, caso de la remodelación del parque María Cristina, e, incluso, participando en el reto tik-tok «Pim, pam, pum» de la tiktoker Brillilu, y Germán Beardo, con la campaña «Vamos a más». A ellos se suman el alcaldable y candidato de la Línea de la Concepción Juan Franco, con videos de producción propia barrio a barrio, o el socialista y candidato a la alcaldía de Vejer de la Frontera, Antonio González. Redes desde las que también hacen público el calor y el respaldo de sus líderes provinciales y regionales.

Línea de promoción electoral que comparten la gran mayoría de los alcaldables de la provincia de Cádiz, que, en detrimento de los siempre arriesgados mítines de tiempo atrás, optan por fórmulas de encuentro y conversación como «cafés con…» o, incluso, con actividades de observación del cielo, como celebrará este domingo el candidato popular de Vejer, José Ortiz.

Y es que, «aderezos» a un lado, lo fundamental para todos y cada uno de los partidos y candidatos a las municipales del 28 de mayo no ha cambiado: captar el voto del ciudadano.