Trágico final

Muerte de Álvaro Prieto: las hipótesis que maneja la Policía Científica

El cuerpo presentaría quemaduras en las manos por descarga eléctrica. Renfe asegura que el tren no se movía desde agosto porque estaba en reparación

El sorpresivo hallazgo del que por varios medios -el Córdoba CF, SOS Desaparecidos, Renfe y fuentes policiales- ha sido confirmado como el cuerpo de Álvaro Prieto abre numerosas incógnitas. Fuentes policiales señalaron a LA RAZÓN que la principal hipótesis que se baraja como causa de la muerte es el aplastamiento. El joven pudo meterse entre los vagones en su intento por salir de Sevilla. Se ha barajado también que pudiera haber sufrido una descarga eléctrica. No obstante, Renfe ha asegurado que el tren no se movía desde agosto, lo que arroja más incertidumbre a la investigación después de que dos reporteros de RTVE grabaran casualmente el cadáver entre vagones. La autopsia será "crucial" ante la posibilidad también de que el cuerpo haya sido colocado y los agentes están ahora mismo en esa línea. El tren en cuestión es el mismo que el 23 agosto atropelló un coche en un paso a nivel en Alcolea. El cuerpo, según la primera inspección ocular, presentaba heridas compatibles con la muerte por descarga eléctrica, ya que tendría quemaduras en las manos y pérdida del cabello, adelantó Diario de Sevilla. Por el estado del cuerpo, podría haber fallecido cuando se alertó de la desaparición hace cuatro días.

Fuentes policiales señalan también a este diario que el tren en cuestión no era un Sevilla-Córdoba sino un regional Sevilla-Cádiz-Málaga. La Policía buscó en el AVE a Córdoba y en los trenes que va a esta provincia, según confirmaron también las mismas fuentes. Se desconoce aún como ADIF no localizó el cuerpo.

Se conoce por la investigación que el joven fue echado de la estación y de las propias inmediaciones de las vías varias veces por el estado que presentaba. La investigación continúa abierta, ya con el Grupo de Homicidios también y la Policía Científica en el lugar de los hechos.

La noche previa, la UME estuvo buscando en las vías de la Estación de Santa Justa e inmediaciones.

Por parte de Renfe se emitió un comunicado dando las condolencias y asegurando que "el tren donde ha aparecido no prestaba servicio por avería". "Desde agosto no se ha movido ni ha pasado revisión. Hoy realizaba una maniobra sin viajeros. Renfe colabora en la investigación con la policía". Todo ello siembra de más dudas la investigación.

De su lado, oficialmente, la Policía Nacional por la mañana señalaba que no había confirmado ni podido confirmar "que el cadáver sea el de Álvaro porque según los procedimientos policiales y judiciales debemos esperar tanto al levantamiento del cadáver por parte de la autoridad judicial (las actuaciones están bajo secreto) como a la identificación fehaciente por parte de Policía Científica". Diversas fuentes, también de ámbito policial, sí confirmaron a este diario que el cuerpo correspondía al joven desaparecido el pasado 12 de octubre.

La causa la lleva el Juzgado de Instrucción número 11 de Sevilla, que se encontraba de guardia de incidencias cuando se recibió la denuncia de la desaparición del joven. Conforme establecen los protocolos, el Juzgado decretó el secreto de las actuaciones, secreto que se alzó una vez se localizó el cuerpo. Una comisión judicial bajo la coordinación del Juzgado de Instrucción número 17 de Sevilla, de guardia de incidencias, se ha trasladado a la zona donde ha sido hallado el cuerpo para proceder al levantamiento del cadáver. Tras ello, la Policía informó oficialmente de que "la policía científica ha identificado el cuerpo hallado y se corresponde con Álvaro".