Política

A Espadas se le atraganta la defensa de la amnistía

«Comprende» que haya quien la cuestione oyendo a Puigdemont

Juan Espadas acudió al Lunes Santo en la capital hispalense
Juan Espadas acudió al Lunes Santo en la capital hispalenseX de Juan Espadas

El secretario general del PSOE en Andalucía –una comunidad eminentemente en contra de la desigualdad entre regiones, de donde surge el 4-D y el 28-F– es también portavoz de Pedro Sánchez en el Senado. La defensa de la amnistía sin que suponga una desconexión total con el electorado andaluz–poco menos que sorber y soplar a un tiempo– se le atraganta a Espadas, que apoya la amnistía por el «interés general» aunque «comprende» que haya quien la cuestione oyendo a Puigdemont.

Hace apenas unos meses el portavoz de Sánchez en el Senado decía que el PSOE «ha llegado hasta donde puede llegar» con la ley de amnistía. En este tiempo, se han ido traspasando líneas rojas. «Si Junts no está dispuesta a avanzar en esa dirección, va a ser difícil el acuerdo», señalaba entonces Juan Espadas Espadas. Se da la circunstancia de que, además, el portavoz del PSOE en el Senado, como alcalde de Sevilla, apoyó una declaración institucional censurando la actuación de los independentistas catalanes. Espadas votó favorablemente «en apoyo de la Unidad de España, el restablecimiento del orden constitucional y en respaldo a la Policía Nacional y la Guardia Civil».

El alineamiento del PSOE andaluz de Espadas con los postulados del «sanchismo» no se limita a la equidistancia respecto a la negociación con los independentistas. Más allá de la falta de crítica, el 10 de junio de 2021, el Parlamento andaluz ya se opuso a los indultos del procés con el voto en contra del PSOE y de Adelante. Ahora, el secretario general del PSOE-A insistió en defender la proposición de ley de amnistía para los encausados por el proceso independentista catalán calificándolo como útil para el «interés general» de España y, particularmente de Cataluña. No obstante, Espadas admitió que «comprende» que haya ciudadanos que se pregunten «para qué» se ha impulsado esa iniciativa «cuando uno escucha» al expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, o algunas «proclamas independentistas».

En una entrevista en Onda Cero, recogida por Europa Press, Espadas defendió que el PSOE tiene «una apuesta de medio y largo plazo de convivencia y de interés general para Cataluña en el proyecto de España». «No estamos pensando en las próximas elecciones», sino «en lo que necesita Cataluña y en lo mejor para el interés general, en un contexto que va mucho más allá de este presente, de esta realidad o de esta coyuntura», señaló. «Por eso nosotros apostamos por algo que sabemos que a veces es difícil de entender», como ha ocurrido con «otras decisiones políticas en la Historia que no se entendieron en el momento de tomarlas», defendió Espadas.

Espadas se mostró «convencido» de que las elecciones del 12 de mayo van a servir para «cambiar la aritmética política y parlamentaria en Cataluña» y van a «favorecer a aquella fuerza política –el PSC– que está apostando por el diálogo, por la convivencia y por construir, y no sencillamente por el egoísmo, por la independencia».

«Cataluña necesita a un presidente de la Generalitat como Salvador Illa», dijo Espadas. El líder del PSOE-A defendió también que la proposición de ley de amnistía «no se hace en ningún caso para favorecer el que el independentismo esté fuerte o más fuerte», sino «para dar razones a la sociedad catalana» para que «abandone esa estrategia de ruptura o de confrontación» que «no nos conduce a ninguna parte».

Por su parte, «frente al ruido y el desagravio sin límites el Gobierno andaluz va a dar la batalla política, ciudadana y jurídica. No vamos a tolerar ningún agravio hacia Andalucía», defendió el portavoz del Gobierno. Ramón Fernández-Pacheco lamentó el «clima de crispación generalizada» en el panorama político español.

El Ejecutivo regional –señaló el portavoz andaluz- no puede permitir que la «supuesta reconciliación» con la que el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, pretende «vender» los pactos con los independentistas la terminen «pagando» los andaluces.