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Los detalles

La Fiscalía asume el relato del Servicio Andaluz de Salud: no hubo "manipulación" en el supuesto borrado de mamografías

"La teta de Anabel", la imagen que mostró la portavoz de Por Andalucía, Inma Nieto, resume un caso que hasta fue desmentido por una ex consejera de Salud del PSOE

Inmaculada Nieto mostró una mamografía supuestamente manipulada en el Parlamento de Andalucía Europa Press

La portavoz de Por Andalucía, Inmaculada Nieto, que cederá el testigo a Antonio Maíllo en las próximas elecciones autonómicas se retrató en el Parlamento de Andalucía en plena crisis de los cribados de cáncer de mama: "Mire, esta es la teta de Anabel. Y esta era la mamografía que aparecía en su historial clínico antes de que se cayera el sistema, como el de la venta de entradas de un concierto, con su lesión marcada y el nombre del facultativo que la dio. Y esta es la mamografía que ha reaparecido en su historial, sin el círculo de la lesión y sin el nombre del profesional".

Era el momento que la izquierda andaluza visualizó como el más crítico para el Gobierno de Juanma Moreno y querían aprovecharlo de cualquier manera. Decía Nieto, durante una pregunta parlamentaria al presidente de la Junta de Andalucía lo siguiente: "Se le acumulan a usted las contestaciones y las respuestas. Que ya dirán los tribunales lo que ha pasado, los rastros y demás. Porque decían ayer: «es que tocar una historia deja rastro». Que está a la altura de: «es que no podemos saber a cuántas mujeres les pasa esto, porque mirar las historias clínicas es ilegal».

Los tribunales no han hablado porque el caso no se ha judicializado, toda vez que la Fiscalía directamente lo ha archivado. En concreto, la Sección de Criminalidad Informática de la Fiscalía Provincial de Sevilla ha decretado el archivo de las diligencias de investigación abiertas.

La investigación, iniciada el pasado mes de octubre, tenía por objeto esclarecer si los fallos en el acceso a pruebas diagnósticas (mamografías y ecografías) a través de la aplicación ClicSalud+ y el sistema Diraya respondían a "un borrado intencionado o a un acceso ilícito" a las bases de datos del SAS.

Tras "analizar los informes técnicos" del SAS y las "pesquisas" de la Unidad de Policía Judicial, el Decreto de fecha 26 de noviembre de 2025 concluye que no hubo "ni saturación del sistema, ni manipulación interna ni sabotaje externo". La caída del servicio de visualización experimentada en octubre fue "provocada por una avalancha de peticiones" que saturó el módulo de 'Visor para la ciudadanía'. "Se ha determinado que este incidente tuvo un impacto exclusivamente operativo en la visualización externa, sin afectar a la integridad, autenticidad o trazabilidad de los registros clínicos alojados en los servidores centrales", subraya la Fiscalía.

Las auditorías realizadas sobre los historiales de las pacientes denunciantes confirman que "no se han producido modificaciones, supresiones ni accesos no autorizados en sus expedientes médicos". Los registros de seguridad "demuestran" que la información se mantiene "íntegra y coincidente con los protocolos asistenciales". Respecto a la denuncia específica de una paciente sobre la "supuesta eliminación" de un informe de mamografía y la anulación de una ecografía, "la investigación técnica ha descartado cualquier manipulación". Los cambios en la programación de pruebas obedecieron a "criterios de gestión clínica y no a una intervención externa o malintencionada", subraya el órgano judicial.

Al "no apreciarse indicios" de los delitos de descubrimiento y revelación de secretos (arts. 197 y 198 CP) ni de daños informáticos (art. 264 CP), el fiscal delegado de Criminalidad Informática ha acordado el archivo de las actuaciones. La Fiscalía ha recordado, no obstante, que "este archivo se ciñe exclusivamente a los delitos objeto de denuncia y no impide que las personas interesadas puedan plantear sus discrepancias sobre retrasos o reprogramación de pruebas o sobre los criterios médicos aplicados ante la jurisdicción competente o por los canales administrativos habilitados".

Hay que recordar que la ex consejera socialista de Salud, Marina Álvarez (2017-2019), actualmente jefa de Radiodiagnóstico del Hospital Reina Sofía de Córdoba, también descartó por completo la posibilidad de que se hubieran manipulado datos en las mamografías de algunas pacientes tras la caída del sistema informático.

Explicaba la ex responsable de la cartera de Salud en el Gobierno de Susana Díaz, que "en Andalucía la mamografía por cribado se lleva a cabo por dos radiólogos, para mejorar la sensibilidad tal y como recomienda la Unión Europea. Se utiliza un sistema de información específico que está ligado con la historia de la paciente y ahí el radiólogo refleja la densidad de la mamografía, si existe algún hallazgo y su localización (...) esta información junto a las imágenes de la paciente quedan archivados en su historial clínico y están disponibles para cualquier facultativo o para la propia paciente si quiere disponer de las mismas", explicó.