Ciencia
¿Cuál es el origen del envejecimiento humano? Científicos de la Universidad de Granada podrían tener la respuesta
Este hallazgo puede ser clave para comprender el porqué de múltiples enfermedades
Investigadores de la Universidad de Granada, en colaboración con grupos científicos nacionales e internacionales, han demostrado que la proteína BMAL1, conocida por regular los ritmos circadianos, actúa en embriones como guardián del genoma.
Esto sugiere que el envejecimiento empieza en las primeras fases del desarrollo del embrión, y no solo en la vida adulta, un trabajo que abre un paradigma en biomedicina al examinar el papel de una proteína en la vejez y su vinculación con algunas enfermedades.
Este dato abre nuevas perspectivas para comprender el envejecimiento y el origen de múltiples enfermedades humanas ya que el equipo multidisciplinar de científicos ha identificado una función desconocida de esta proteína durante el desarrollo embrionario en ratones.
Tradicionalmente, BMAL1 se ha estudiado como parte del 'reloj circadiano', la maquinaria molecular que regula los ritmos diarios del organismo humano, pero este estudio ha revelado que, en las fases tempranas de la vida, actúa asociada a otra proteína para mantener apagada la actividad de los retrotransposones, fragmentos de ADN capaces de 'saltar' dentro del genoma y alterar su función. Los resultados demuestran que la ausencia de BMAL1 en células madre embrionarias de ratón provoca la activación masiva de estos elementos móviles, generando cambios en la organización 3D del genoma y alteraciones en la funcionalidad de las células que forman el embrión.
Este descontrol genómico está probablemente vinculado con el envejecimiento prematuro descrito previamente en ratones deficientes en BMAL1. "Nuestros resultados apoyan que BMAL1 ejerce una función protectora esencial durante el desarrollo embrionario, independiente de su papel en el reloj circadiano", ha explicado el investigador Amador Gallardo, primer autor del trabajo.
Por su parte, el investigador principal del grupo y autor responsable del trabajo, David Landeira, ha explicado que el equipo cree que este mecanismo puede estar en la base del envejecimiento acelerado.
El hallazgo abre un nuevo paradigma en biomedicina, ya que proteínas clásicamente asociadas al reloj circadiano pueden tener funciones alternativas durante el desarrollo, cruciales para mantener la estabilidad del genoma y la identidad celular.
"Estos descubrimientos refuerzan la idea emergente de que el envejecimiento se inicia ya en las primeras fases del desarrollo embrionario, y no únicamente en la vida adulta, como se pensaba hasta ahora", han resumido los científicos del estudio.