Elecciones generales

«No es Sánchez, somos nosotros»: la proclama del «Imserso socialista»

Los veteranos del PSOE-A presentan el manifiesto de apoyo al presidente frente a críticos como Alfonso Guerra

Los veteranos del PSOE de Andalucía en la presentación del manifiesto en apoyo a Pedro Sánchez de cara a las elecciones generales
Los veteranos del PSOE de Andalucía en la presentación del manifiesto en apoyo a Pedro Sánchez de cara a las elecciones generalesAgencia EFE

Borrell, Almunia, Maravall, Solchaga, Atienza, Eguiagaray... hasta llegar a Gracia y Pezzi, dos de los Manolos libres de carga legal, que hicieron de maestros de ceremonia. El tercer Manolo, Chaves, aunque inhabilitado por los ERE ante la justicia, también firmó.En el caso de Griñán, no hay rúbrica pero sí apoyo explícito. Más que una delantera, una plantilla stuka de veteranos socialistas –unos 350– acudieron a la llamada de «lealtad» del presidente Zapatero, convertido ya en rey Mufasa del «sanchismo», en la voz del intento de resurrección socialista de cara al 23J. «¿Habéis visto para lo que hemos quedado el Imserso socialista?», bromeaba el otrora todopoderoso en el PSOE de Sevilla José Caballos. Los veteranos del PSOE-A, a los que se sumaron ministros de Felipe González de otras latitudes, presentaron el manifiesto en apoyo a Pedro Sánchez en la sede de la calle San Vicente. Una vez más, Alfonso Guerra fue el elefante en la habitación de Pedro Sánchez. «Quieren derogar el socialismo, no a Sánchez», señaló la vieja guardia que protagonizó en primera persona la Transición, las generales del año 77, el 28F andaluz, el Estatuto o las autonómicas del año 82.

El que fuera presidente del Parlamento andaluz Manuel Gracia se encargó de la elaboración del manifiesto. La raíz del movimiento, al margen de la defensa zapaterista, está en un grupo de WhatsApp de ex dirigentes del PSOE-A. El manifiesto se titula «No es Sánchez, somos nosotros» y, aunque la reminiscencia al título del filme protagonizado por Diego Peretti es inevitable –«No sois vos, soy yo»–, pretende desmontar el argumento de que el PSOE «verdadero» que construyó algunos de los principales pilares del Estado de Derecho no apoya los distintos movimientos de Pedro Sánchez en el poder.

«Había que desmontar la mentira», señalaron, aunque evitaron las referencias a Alfonso Guerra –«A mí izquierda, el abismo», señalaba en los 80– y no apoyaron –por lo que pueda pasar, se entiende– la tesis de Felipe González de que lo «aceptable» es dejar gobernar a la lista más votada y los «pactos de centralidad». «Hay quienes, en el colmo del pensamiento más retorcido, propugnan sin pudor que el PSOE de Sánchez debe perder para que el PSOE de verdad se regenere y vuelva a las esencias perdidas, después, naturalmente, de unos años de gobierno de derechas», recoge expresamente el manifiesto.

Los abajo firmantes del manifiesto afirman «alto y claro» que el PP quiere «destruir los avances sociales, la protección social y derogar todas las medidas que han hecho avanzar a este país, privatizar la sanidad, la educación y destruir el Estado del Bienestar». «La sociedad española se enfrenta al dilema de avanzar o retroceder, no es Sánchez, somos nosotros» porque el objetivo real es destruir al PSOE, señaló Manuel Gracia.

Manuel Pezzi destacó el «orgullo de los que dirigimos el PSOE por su ímprobo trabajo». «Somos el PSOE, somos socialistas y somos leales a nuestra organización», defendió, argumentando que esa lealtad implica siempre que «aunque haya diferencias a la lo largo de la historia, siempre se ha superado con lealtad y con respeto a las decisiones de los órganos competentes».

«La derecha lo que hace es satanizar a Pedro Sánchez como ya hicieron con Felipe González», indicó Gracia, recordando el «váyase señor González» o "como se hizo con Zapatero culpándole de la crisis económica mundial".

«La sociedad española se enfrenta al dilema de avanzar o retroceder, no es Sánchez, somos nosotros, porque el objetivo a destruir es el PSOE, que ha querido siempre hacer una política al servicio de la mayoría», sostuvo Gracia. Lo que remite, de nuevo, a una cita del filme argentino: «No era la mejor mujer del mundo, pero era la que se acostaba y se despertaba todos los días conmigo. Yo a más de eso no puedo aspirar…». Faltan tres domingos para las elecciones.