Artesanía

El enfriador de agua más eficiente y ecológico del mercado: el botijo

Está considerado como ingeniería artesanal de vanguardia y desde Jaén se apuesta por su diseño

La fórmula del botijo
La fórmula del botijoLa RazónBootijo

Por mucha revolución tecnológica que se venda, la rueda está inventada desde los albores de la humanidad y el sistema más eficiente y ecológico para mantener el agua fresquita también y, sin necesidad de electricidad ni wifi, se llama botijo.

Desde Jaén, la empresa Bootijo se dedica a la comercialización y diseño de esta revolucionaria e histórica tecnología. “La invención del botijo es algo imposible de determinar con precisión. Este recipiente, al igual que otros objetos de arcilla, cuenta con miles de años de historia. Su origen se remonta a la Mesopotamia de hace unos 5500 años, cuando se empezaron a desarrollar las primeras técnicas de cocción del barro. Con el transcurso del tiempo, su fabricación fue extendiéndose por otros territorios y civilizaciones hasta llegar a nuestros días”, señalan en su web. “En España el botijo más antiguo encontrado es el que se conserva en el Museo Arqueológico de Murcia. El hallazgo, hace unas seis décadas, se produjo en la necrópolis de Puntarrón Chico, en Beniaján, Murcia. Se atribuye a un destacado poblado de la cultura argárica y se etima que puede tener más de 3.500 años. Su diseño es diferente al que hoy día conocemos, ya que su forma es cilíndrica incorporando un pequeño orificio y asa en la parte superior. Su tamaño es de 11 x 9,5 cm.”, explica Bootijo.

“Los estudios científicos aplicados al “efecto botijo” son relativamente recientes, de hecho no es hasta 1990, cuando dos profesores de la Escuela de Ingeniería Industrial de la Universidad Politécnica de Madrid (UPM), dieron con la fórmula matemática oculta hasta entonces. El catedrático Gabriel Pinto y, posteriormente, José Ignacio Zubizarreta, se unieron en el estudio la “misteriosa” capacidad del botijo para enfriar el agua, dando como resultado 2 ecuaciones sumamente complejas, y demostrando así que el “mecanismo del botijo”, como dice el refrán, para nada es “simple””, explica la empresa.

Fórmula del mecanismo del botijo desarrollada por Gabriel Pinto y José Ignacio Zubizarreta
Fórmula del mecanismo del botijo desarrollada por Gabriel Pinto y José Ignacio ZubizarretaLa Razón

La fabricación del botijo tiene seis fases: preparar el barro, amasar, tornear, pegar las piezas, secar y cocer.

Preparación del barro

“Antiguamente esta fase requería un proceso muy laborioso que abarcaba la búsqueda, recogida, transporte, tamizado y secado del barro. En la actualidad todo este proceso es realizado industrialmente”, explica la empresa.

Amasado

Para “eliminar el aire que la arcilla pueda contener, dejando la pella lista para trabajarla”.

Torneado

“Se comienza dando forma al cuerpo del botijo dejándolo airear una vez torneado. El resto de piezas (boca, asa y pitorro) se realizan a parte y también se dejan airear para que el barro tenga suficiente consistencia”, explica Bootijo.

Pegado de piezas

“Se procede a unir la boca, asa y pitón al cuerpo del botijo, repasando el conjunto para lograr un acabado fino”, continúa.

Secado

Cuando se termina la pieza, “se deja secar el tiempo suficiente para que no se fracture en la fase de cocción debido a las altas temperaturas del horno”.

Cocción

Por debajo de los 1000 grados de temperatura en un horno “para evitar que los microporos de la arcilla se sellen. Esto es fundamental para que el botijo pueda realizar su función térmica de enfriamiento del agua. Solo si el uso final del botijo es como decoración se procedería a una segunda cocción tras la fase de esmaltado”.

Conservación del botijo

“En condiciones adecuadas de ventilación y grado de humedad, el botijo no precisa ningún cuidado especial. No obstante, cada cierto tiempo, y especialmente si empiezan a aparecer pequeñas manchas oscuras, se aconseja aplicar un sencillo tratamiento desinfectante para eliminar cualquier impureza o restos de moho”, explica la empresa de Jaén.

Limpieza y desinfección de un botijo:

1. Llenar el botijo con agua y lejía. Proporción 20ml de lejía x cada litro de agua.

2. Dejar actuar la dilución durante 24h.

3. Posteriormente enjuagar bien el botijo.

Pasos para curar un botijo:

1. Llenar el botijo de agua corriente.

2. Añadir un chorro generoso de anís.

3. Dejarlo 24h en reposo (debido al proceso de sudoración aconsejamos ponerlo sobre un plato).

4. Vaciar. Ya se puede disfrutar de agua fresca y natural.

Cómo beber en botijo

“El método para beber en botijo es muy similar al empleado para beber en porrón o en bota. Así que si ya tienes experiencia en beber a caño tienes mucho ganado. Si no es tu caso, la clave para aprender está en no tener miedo a mojarte”, explica la web de Bootijo.

Pasos para beber en botijo:

1. Coger el botijo por el asa con una mano mientras sujetas el cuerpo con la otra mano.

2. Acercar el botijo a la cara dejando una distancia entre el pitorro y la boca de unos 5 o 7 cm.

3. Inclinar el botijo lentamente hasta que salga el agua.

4. Coordinar la respiración mientras el agua va cayendo.

5. Retirar con decisión el botijo para evitar mojarte.

Se apunta como “importante” que “para mantener una correcta higiene hay que evitar beber directamente del pitorro del botijo, aunque éste sea para uso personal. Los microorganismos y bacterias presentes en la boca pueden dañar el botijo con el tiempo”.

Cómo funciona el “efecto botijo”

La empresa señala que “para enfriar el agua el botijo emplea un sistema de refrigeración por evaporación. Gracias a la porosidad de la arcilla, diminutas gotas de agua se van filtrando al exterior del botijo, acción conocida como sudoración, empapando su cuerpo. Estas gotas, en contacto con un ambiente más cálido y seco, empiezan a (4) evaporarse al convertir en energía el calor que hay dentro del botijo. Como resultado la temperatura interna disminuye y el agua se mantiene fría”.

El "efecto botijo"
El "efecto botijo"La RazónBootijo

“El grado de enfriamiento dependerá de factores como la cantidad de agua contenida en el botijo y de las condiciones ambientales. Este proceso térmico, cumple una función muy similar a la que realiza el sudor en nuestro organismo para reducir la temperatura corporal”, explica.