La Junta podrá cerrar empresas que falseen la gestión de residuos

Una vez más el Gobierno de Juanma Moreno cumple su palabra de aplicar una mayoría dialogante y reforzada. Sucedió con la Ley de Atención Temprana, con la modificación de la Ley de Emergencias y ayer con la aprobación de la esperada y «pionera» normativa legal de Economía Circular de Andalucía (LECA), que contó con el respaldo del partido socialista –se aceptaron 61 de sus enmiendas–, así como la abstención de Por Andalucía y Adelante, y la única oposición de Vox, instalado en el rechazo a todo lo que huela a la «Agenda 2030».

La LECA era una de las leyes estrella de la pasada legislatura, frustrada por el adelanto electoral, y que responde a la necesidad de implantar uno nuevo modelo productivo basado en alargar la vida de los residuos como fórmula de combatir los efectos del cambio climático y que, por tanto, encaja en el mensaje de «revolución verde» y compromiso medioambiental que la Junta se esfuerza en transmitir, sin renunciar al crecimiento y el desarrollo económico de la comunidad.

Aunque es cierto, como han recordado Por Andalucía y Adelante, que en su extenso articulado no se fijan obligaciones u objetivos concretos con marcos temporales, también lo es que la LECA contempla incluso el cierre de empresas por «la alteración del funcionamiento normal del proceso productivo, con objeto de falsear los resultados de una inspección», «el uso fraudulento de las certificaciones acreditativas en materia de análisis de ciclo de vida y economía circular», «el falseamiento de los datos de los productos» o «la ocultación o la alteración maliciosa de datos para la obtención de autorizaciones, permisos o licencias en materia de economía circular», como se refleja en el régimen sancionador para infracciones catalogadas como «muy graves». Así, las sanciones económicas que pueden llegar a 120.000 euros pueden ir acompañadas incluso de la «clausura definitiva, total o parcial, de las instalaciones».

No obstante, la ley es mucho más. Para favorecer las inversiones en economía circular, prevé que los proyectos de actividades de valorización material sean considerados como inversiones empresariales de interés estratégico.

Establece también el principio de jerarquía de los residuos y se transponen objetivos concretos y cuantificables de diferentes directivas europeas sobre residuos, aún no transpuestos a la normativa nacional, siempre en el ámbito de competencias autonómico.

La ley aboga por establecer procedimientos específicos para el caso en que una sustancia u objeto de un proceso productivo concreto, desarrollado en Andalucía, pueda ser considerado subproducto y se especifica el procedimiento para que, en ausencia de órdenes ministeriales, un residuo valorizado en una instalación ubicada en territorio andaluz pueda dejar de ser residuo para su uso en una actividad o proceso industrial. Se aborda la recogida de basuras marinas, las cadenas de valor de electrónica, tecnologías de la información y la comunicación, baterías y vehículos, con aspectos como la recogida y gestión de los residuos de los aparatos eléctricos y electrónicos...

El último Informe de Medio Ambiente de Andalucía detalla que los andaluces producen al año alrededor de 4.645 millones de toneladas de residuos. La implantación de prácticas en la ciudadanía tendrá mucho que decir en el éxito final de la norma.

Claves

• ►La Ley se estructura en 94 artículos, distribuidos en 7 títulos, y tiene 6 disposiciones adicionales, dos disposiciones transitorias, una derogatoria y 15 finales.
• ►Prevé crear una Oficina Andaluza de Economía Circular y la elaboración de una estrategia regional, así como instrumentos de planificación locales obligatorios, al menos, para la gestión de residuos municipales.
• ►Circularidad en la producción y el consumo, lucha contra la obsolescencia, gestión de bienes no vendidos e impulso de la reparación son otros conceptos a desarrollar.
• ►Las cláusulas ambientales en la contratación pública se expandirá.

Moreno pide un Perte para obras hídráulicas

La LECA dedica todo un capítulo a la «Implantación de la circularidad en las aguas». Planificación, técnicas de drenaje, aguas regeneradas o la fiscalidad hídrica son abordadas en la ley. Pero por encima de todo ello son necesarias infraestructuras hidráulicas y, por ello, ayer mismo Juanma Moreno volvía a reclamar un Perte. El presidente, coincidiendo con el Día Internacional del Agua, inauguró la nueva estación de bombeo de Osuna, correspondiente al tramo Écija-La Turquilla y pidió a la UE poder usar sus fondos a obras y proyectos ligados con el agua, «lo más importante» en la actualidad por la sequía.

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