Málaga, epicentro de la vanguardia del siglo XXI

Con la mirada puesta en el 21 de junio, día en que la Asamblea General del BIE (Oficina Internacional de Exposiciones) dirimirá en París la capital que finalmente organizará la Exposición Internacional de 2027, la provincia de Málaga arranca la recién estrenada legislatura con grandes retos que potencien su liderazgo económico. No en vano, la propia capital se ha consolidado en los últimos años como todo un referente no sólo a nivel doméstico sino internacional en segmentos como el tecnológico, además del cultural y turístico, que le han hecho ser foco de ambiciosas inversiones.

Con estos mimbres, su hoja de ruta viene marcada por esa evolución que días atrás le hizo albergar una nueva edición de la mayor cumbre europea sobre tecnologías exponenciales a la que han asistido 17.000 directivos de más de una treintena de países de todo el mundo para abordar desafíos como la inteligencia artificial.

No es casualidad que Málaga sea la capital más buscada del mundo para la conocida plataforma de reservas Airbnb en este 2023, o que la compañía United Airlines haya optado por la capital de la Costa del Sol para unir Nueva York con Andalucía de forma directa.

Pero, además de los ámbitos tecnológico y turístico, la provincia tiene grandes desafíos en el plano logístico con hitos como el Puerto Seco, que representa la mayor plataforma del sur de Europa y que verá la luz en los próximos meses en Antequera, o en el ámbito de la movilidad, no sólo a nivel provincial sino en el plano municipal. El Ayuntamiento trabaja ya en la implementación del Plan Málaga Litoral, que plantea un «proyecto global de ciudad» que integra urbanismo, transporte y medio ambiente, con actuaciones como soterrar el tráfico a lo largo de 2,3 kilómetros del eje litoral de la capital.

La fisonomía de la ciudad se verá igualmente transformada a partir de la controvertida torre del Puerto, en la que se proyecta un gran hotel-rascacielos que durante el anterior mandato contó con el enérgico rechazo no sólo de la oposición, sino del socio de gobierno de los populares, Ciudadanos.

Además, se incidirá en la construcción de dos grandes torres sobre los antiguos terrenos de Repsol y, en definitiva, avanzar en la línea de desarrollo urbanístico vertical.

Precisamente, la vivienda es uno de los grandes hándicaps de la ciudad, a partir de la creciente demanda a la que difícilmente se puede dar respuesta y el consiguiente encarecimiento de precios que ha propiciado el mercado.

Con todo, avanza a buen ritmo el que se ha venido a llamar Distrito Zeta, el conocido como barrio del futuro que se asienta sobre una superficie de 66 hectáreas donde se proyecta un total de 3.443 viviendas incrustadas en un entorno diseñado por y para la GeneraciónZ.

Durante el año en curso está previsto además que comiencen las obras de la marina deportiva San Andrés, en el distrito Carretera de Cádiz, en la zona Oeste del Puerto ,malagueño.

La concesión administrativa, con una duración de 50 años, abarca una superficie de dominio público portuario de 114.475 metros cuadrados, que se dividen en 94.124 metros cuadrados de lámina de agua y 20.351 metros cuadrados de zona terrestre, que dará paso a una marina deportiva con capacidad para 566 embarcaciones de recreo de entre 8 y 30 metros de eslora.

Uno de los iconos económicos de la ciudad es el Palacio de Ferias y Congresos de la capital, que este mes de marzo ha cumplido su vigésimo aniversario, y sobre el que se ha proyectado la ampliación de sus instalaciones, que ocupan una extensión de 60.000 m², de los cuales 20.000 m² son de espacio expositivo.

El Ayuntamiento de la capital pretende en el recién iniciado mandato impulsar una ambiciosa cuya inversión superaría los cien millones de euros, y de la que se lleva hablando varios lustros. Lo que sí está ya en marcha es el primero de los edificios de la ampliación de Málaga TechPark , que el pasado diciembre celebró su treinta aniversario.

Y como no hay dos sin tres, también la Universidad de Málaga, que en este ejercicio celebra su cincuenta aniversario, continuará con el proyecto de ampliación y modernización de los diferentes campus sobre los que se asienta.

El desarrollo exponencial que vive Málaga en ámbito tecnológico se traduce en una realidad tangible como es el hecho de que hayan puesto sus ojos en la ciudad importantes compañías estadounidenses y europeas, líderes en el ámbito de desarrollo de software, consultoría o telecomunicaciones.

A la consabida elección de Google para establecer en Málaga el Centro de Ingeniería de Seguridad (GSEC) concebido como buque insignia en toda Europa del gigante de internet, se suma el Centro de Ciberseguridad de Andalucía que promueve el Gobierno andaluz y que abre sus puertas en el Palmeral de las Sorpresas, en el Puerto de Málaga, para coordinar desde esas instalaciones toda la estrategia andaluza en el seguimiento y actuación frente a los ciberataques. Un desafío que se afronta desde Málaga.

Amazon y Vodafone miran a la ciudad

La empresa Amazon construirá un centro logístico en la zona de Intelhorce, que reemplazará a la estación logística de la compañía que se asienta en la actualidad sobre una parcela de 3.000 metros cuadrados en Los Prados, alquilada desde hace casi un lustro al Administrador de Infraestructuras Ferroviarias (ADIF).

Sí va a ser una realidad ya el «Vodafone Innovation Hub», un centro de investigación y desarrollo tecnológico destinado a convertirse en foco de innovación y referencia en toda Europa, a partir de un ecosistema en el que participan activamente los playes más relevantes de cada sector, entre otros más de 300 ingenieros especialistas en redes móviles, seguridad, comunicaciones IP o software.